Jacob concluyó las bendiciones a sus hijos bendiciéndolos a todos con todas las características únicas de cada uno de ellos.
Unidad en Comunidad
וַיְבָרֶךְ אוֹתָם אִישׁ אֲשֶׁר כְּבִרְכָתוֹ בֵּרַךְ אֹתָם: (בראשית מט:כח)
[Jacob] les dio todas las bendiciones que le dio a cada uno individualmente. Genesis 49:28

A pesar de que cada uno tiene su rol único en nuestra misión Divina para hacer de este mundo un hogar para Di-s, todos estamos involucrados también en alguna medida en los roles desempeñados por otros. Hay tres formas efectivas en forma creciente en la que podemos hacer esto:

Todos nos enfocamos en nuestras tareas personales, pero dado que estamos trabajando hacia el mismo objetivo, todos compartimos los resultados de nuestros logros individuales.

Invitamos y alentamos uno al otro a participar ocasionalmente en la actividad personal en la que nos especializamos.

Cuando nos ocupamos periódicamente en tareas distintas a nuestro fuerte, nos ocupamos en ellas tan completamente como lo hacemos cuando nos ocupamos de nuestras tareas personales.

Participar en los esfuerzos de cada uno fomenta la unidad judía, haciéndonos merecedores de las bendiciones de Di-s, incluyendo, especialmente, la máxima bendición, la Redención Mesiánica.1