Moshé luego describe la experiencia de la recepción de la Torá en el monte Sinaí.
Revelación eterna
אֶת הַדְּבָרִים הָאֵלֶּה דִּבֶּר ה' . . . קוֹל גָּדוֹל וְלֹא יָסָף וגו': (דברים ה:יט)
[Dijo Moshé al pueblo judío:] “D-os habló estas palabras ... con una gran voz, que no se detenía.”Deuteronomio 5:19

Uno de los significados de la expresión “no se detenía” es que la voz de D-os en el monte Sinaí ha sido y sigue siendo revelada en las profecías y enseñanzas de los profetas y sabios de cada generación. El hecho de que esas profecías y enseñanzas no se expresaran en forma explícita en ocasión de la primera Entrega de la Torá obedece a que el mundo y el pueblo judío no lo necesitaban. Permanecían, no obstante, implícitas en la revelación original de la Torá1 .