A continuación, Moshé repasó junto al pueblo judío las leyes que exigen espantar al pájaro antes de tomar sus huevos o pichones, como también aquellas que requieren la construcción de barandas en los techos de las casas para evitar accidentes.
Construir un hogar judío
כִּי תִבְנֶה בַּיִת חָדָשׁ וְעָשִׂיתָ מַעֲקֶה לְגַגֶּךָ וגו': (דברים כב:ח)
[Dijo Moshé al pueblo judío:] “Cuando construyas una casa nueva, debes hacer una baranda en tu techo.” Deuteronomio 22:8

Esta ley puede interpretarse de modo tal de aplicarla a una pareja de recién casados que se embarcan en el emocionante desafío de construir un hogar. La Torá brinda consejo a la pareja que comienza una etapa de la vida con responsabilidades y tareas que nunca han enfrentado antes. Esta nueva e intensificada focalización en el mundo físico representa un “descenso” comparado con sus anteriores vidas de solteros; por lo tanto, corren el riesgo de caer de su anterior nivel espiritual a menos de adoptar medidas preventivas.

Es por ello que deben “hacer una baranda”, es decir, comprometerse a nuevos resguardos espirituales en la observancia de los mandamientos de la Torá, y no confiar solo en los resguardos que tenían antes. Mantener y aumentar el estudio de la Torá y el cumplimiento de sus mandamientos es lo que asegura que la euforia del día del casamiento continúe a lo largo de la vida de casados.1