Es la advertencia con la cual se nos previno de no afligir uno al otro en el comercio, durante la compra y venta.
Es lo que El, exaltado sea, dijo: Y cuando hagáis una venta a vuestro semejante, o compra de manos de vuestro semejante, no aflijáis uno a su hermano. Y en el Sifrá dijeron: "No aflijáis uno a su hermano — esto es honaat mamón, aflicción en (cuestiones de) dinero".
Las leyes de este precepto han sido explicadas ya en el Capítulo Cuarto (del Tratado Talmúdico) de Babá Metziá.