Es el precepto con el cual se nos ordenó decir palabras en el día de Shabat, a su ingreso y a su fin, en las que recordemos la grandeza de este día y su gloria, y el hecho de que es separado respecto de los demás días que lo precedieron y lo sucederán.
Es lo que El, exaltado sea, dijo: Recuerda al día de Shabat para santificarlo, vale decir: recuérdalo con santificación y grandeza. Este es el precepto de Kidush.
En la expresión del Mejilta: "Recuerda al día de Shabat para santificarlo — santificarlo con una bendición". Explícitamente dijeron: "Recuérdalo sobre el vino". Más dijeron: "Santifícalo a su ingreso y santifícalo a su egreso" es decir (se incluye también) la Havdalá, la que es parte del recuerdo del Shabat acerca del cual se nos ha ordenado.
Las disposiciones que hacen a este precepto han sido explicadas ya al final (del Tratado Talmúdico) de Pesajím y en otros lugares (del de) Berajot y Shabat.