Es el precepto con el cual se nos ordenó entregar anualmente medio Shékel.
Es lo que El, exaltado sea, dijo: Y darán a Di-s, cada hombre, rescate por su alma, y dijo: Esto darán.
Es claro que las mujeres no están obligadas en (el cumplimiento de) este precepto, pues el versículo dice: Todo el que pasa por la cuenta (militar).
Las leyes de este precepto han sido explicadas ya en el Tratado (Talmúdico) específico a él, vale decir: el Tratado de Shekalím.
Allí fue explicado que este precepto es vigente sólo delante del Santuario.