Es más: Lo cierto es que las refinaciones en Beriá, Ietzirá y Asiá de las 288 [chispas de Tóhu] —por medio de la Torá y las mitzvot con el pensamiento, la palabra y la acción [al estudiarla y cumplirlas]— son superiores, en su fuente, al NéfeshRúajNeshamá del hombre [que ama y teme a Di-s]. Pues éstas [refinaciones] derivan del Nombre Divino Sa"g del aspecto interno de Adám Kadmón, en tanto que el NéfeshRúajNeshamá que ya ha sido enmendado por medio del Nombre Divino Ma"h — [Ma"h] emana de la "frente" [de Adám Kadmón], un mero reflejo [de él, pero no su esencia]. De ahí que esté escrito: "...antes de que rigiera un rey [sobre los Hijos de Israel]". Y ésta es la razón de que el hombre sea sustentado por alimentos [provenienes] de los reinos mineral, vegetal y animal, y los purifica con el Ma"h que hay en él, y vive por aquellos: porque aquellos derivan de Sa"g.

Otra [supremacía] más — como está escrito: "Mi Rostro (paním [vinculado a pnimiut, "Mi dimensión interior"]) no será visto". Esto significa que el aspecto interior de un grado verdaderamente más alto no puede descender [de manera revelada], sino sólo [puede hacerlo] el aspecto exterior y la parte posterior, que son sombras de la Sabiduría Suprema.

Otra [supremacía] más: Pues verbalizar cualquier frase de la Sabiduría Suprema no procrea, mientras que la gota que desciende del recipiente de la Sabiduría Suprema tiene el poder de procrear y dar origen a la existencia de algo [nuevo] a partir de la nada, y también lleva incorporado [en su interior] un flujo de la Sabiduría Suprema. La razón: Porque con la gota fluye la esencia y naturaleza de la Sabiduría Suprema. No sucede lo mismo con el pensamiento y el habla [del intelecto que se verbaliza o medita], ni siquiera con la concepción intelectual en cualquier campo de la sabiduría; esta sabiduría es un mero reflejo que se propala de la esencia del intelecto del alma, y este reflejo es [a su vez] una mera vestimenta para la esencia misma del intelecto, y el intelecto, a su vez, es apenas un reflejo y vestimenta para la esencia del alma. Dentro de la gota, en cambio, se propala también algo de la misma esencia y ser del alma investida en el cerebro, y por eso da a luz progenie similar, tal cual, al alma misma.

Esta es la diferencia entre el servicio Divino de los ángeles —que nacen de un beso espiritual [y por lo tanto su servicio es análogamente espiritual]— y el de las almas —que emanan de los "recipientes"—. Sin embargo, los recipientes de Atzilut se volvieron el alma de Beriá, Ietzirá y Asiá [y de esta alma emanan dos formas de flujo]. Por lo tanto, el amor y temor intelectuales son comparables a los ángeles que emanan del beso espiritual, [un aspecto meramente espiritual] del reflejo del aspecto exterior de JaBaD en Beriá, Ietzirá y Asiá. La razón [de que sea así] es que la dimensión más interior de JaBaD y la esencia y ser de la luz residente (or pnimí) no puede revelarse salvo a través del resplandor de los recipientes que descienden abajo, como [lo hace] la gota seminal del hombre [emanando] del cerebro, y como está escrito: "Mi Rostro [=Mi dimensión más interior] no será visto".