Ahora bien, la Voluntad Suprema es denominada y llamada por los cabalistas Kéter Elión ("Corona Suprema"). En ella hay 620 pilares de luz. Esto es, a modo de analogía: Tal como en una gran casa de ladrillos hay pilares que se alzan en el suelo y su cabecera está conectada con el cielorraso, precisamente así, metafóricamente hablando, Kéter Supremo trasciende el nivel de jojmá. [La palabra Kéter] está relacionada con koteret ("capitel"), pues rodea y abarca los sesos en la cabeza, es decir, las facultades de JaBaD.
Esta Voluntad [Suprema] está investida en los 613 mandamientos de la Torá y los 7 preceptos de los Sabios, que en su amplia mayoría son mandamientos de acción. Y también [lo está en] aquellos mandamientos que dependen del habla — pues tenemos un principio halájico aceptado de que "el movimiento de sus labios [al hablar] es una acción". E incluso [lo están en] aquellos mandamientos que dependen del pensamiento o del corazón — pues los mandamientos fueron dados específicamente al hombre físico en este mundo [físico], porque él tiene la elección de torcer su corazón al bien etc. El alma sin un cuerpo, en cambio, no precisa que se le ordene esto. Resulta, entonces, que los mandamientos, metafóricamente hablando, son como pilares que se alzan, [y conectan] desde el más excelso de los niveles —a saber, la Voluntad Suprema— hasta este mundo material. Son, a modo de ejemplo, como pilares huecos que abarcan y visten [con la vestimenta de mitzvot] la Neshamá, o el Rúaj, o el Néfesh del hombre, cuando cumple los mandamientos. Por vía de estos pilares [de mitzvot] su Néfesh, Rúaj y Neshamá ascienden al más excelso de los niveles, para ligarse "en el nexo de la vida con Di-s", esto es, estar ligados e investidos en la luz de Kéter, que es la Voluntad Suprema. Y por medio de esta vestimenta pueden contemplar la "agradabilidad de Di-s" y la "placentera sed" que trasciende el nivel de Kéter y, metafóricamente hablando, son su pnimiut. (Si bien en otra parte se explicó que los mandamientos son el pnimiut de la Voluntad Suprema, los conocedores de la Sabiduría Oculta están bien familiarizados con la multitud de aspectos y niveles dentro de cada aspecto y nivel de los [diversos] niveles de la santidad. Hay numerosos aspectos de "cara a cara", y numerosos aspectos de "externalidad a externalidad", sin fin...).
Ahora bien, los 7 preceptos de los Sabios no son contados como mandamientos independientes, pues se ha dicho: "No añadas [a los mandamientos]". Más bien, salen y se derivan de los mandamientos de la Torá, y están incluidos en ellos en la suma de 613 [mandamientos] que visten los 613 aspectos y poderes que hay en el Néfesh, Rúaj, y Neshamá del hombre.