Ahora bien, como es sabido, la Voluntad Suprema tal como está investida en los 613 mandamientos de la Torá Escrita está escondida y cubierta, reservada y oculta. Está manifiesta sólo en la Torá Oral.
Por ejemplo, el precepto de tefilín: En la Torá Escrita se declara: "Y los atarás por señal sobre tu mano, y serán por frontales entre tus ojos". Esta es una declaración sellada y oscura, pues las Escrituras no explicaron cómo y qué atar, ni qué son frontales, ni dónde es "entre tus ojos" o "sobre tu mano", hasta que la Torá Oral explicó que se debe atar una única caja sobre la mano, y cuatro cajas sobre la cabeza, conteniendo cuatro pasajes de las Escrituras. Lo que es más, las cajas serán [confeccionadas] de cuero trabajado, y necesariamente cuadradas, y atarse por medio de correas de cuero que deben ser negras, con todas las demás detalladas leyes que rigen la confección de los tefilín, expresadas oralmente [en la Torá Oral]. También, "sobre tu mano" se refiere sólo al brazo y no a la palma de la mano, y "entre tus ojos" se refiere al sector superior del hueso frontal y no a la frente. Asimismo, todos los mandamientos de la Torá, sean positivos o prohibitivos, no son revelados, conocidos y hechos explícitos sino salvo por intermedio de la Torá Oral. Por ejemplo, el precepto prohibitivo declarado respecto del Shabat: "No harás trabajo alguno":
[La Torá Escrita] no especifica qué constituye trabajo. En la Torá Oral, sin embargo, se explicó que se refiere a las bien conocidas 39 formas de trabajo y no (sólo) al acarreo de rocas o vigas pesadas [prohibido rabínicamente]. Y tal como es con estos [antedichos ejemplos] así es con todos los mandamientos, sean positivos o prohibitivos: son sellados y sólo se explican, revelan y son conocidos a través de la Torá Oral. Por eso las Escrituras dicen de la Torá Oral: "No abandones la enseñanza de tu madre", como lo declara el Zohar. Metafóricamente hablando, tal como todos los órganos de un niño están incluidos, muy latentemente, en la gota seminal del padre, y la madre lleva esto a un estado manifiesto cuando da a luz un niño completo con 248 órganos y 365 tendones, del mismo modo exactamente emergen los 248 preceptos positivos y los 365 preceptos prohibitivos de ocultamiento a manifestación a través de la Torá Oral, mientras que el comienzo del versículo —"Oye, hijo mío, la amonestación de tu padre"— alude a la Torá Escrita, que se deriva de la Jojmá Suprema que es llamada "padre".
Este, entonces, es el significado del versículo [citado al comienzo]: "Una mujer de valor es la corona de su esposo". Pues la Torá Oral es llamada "una mujer de valor" que da a luz, y erige, muchas legiones, como está escrito: "Y alamot ('doncellas') sin número": No leas alamot/עלמות sino olamot/עולמות ('mundos')", aludiendo [estos innumerables mundos] a las halajot que son sin número, como se declara en Tikuním. Todas éstas son manifestaciones de la Voluntad Suprema oculta en la Torá Escrita.
La Voluntad Suprema [que pertenece a la Sefirá de Kéter, lit. "corona",] es sumamente más sublime que el nivel de Jojmá Suprema, tal como una corona o diadema que está encima del cerebro en la cabeza. Por eso las halajot son llamadas "corona" y "corona de la Torá". Y "Quien estudia [específicamente] halajot tiene asegurada una parte en el Mundo por Venir" al investir su Néfesh, Rúaj y Neshamá en la Voluntad Suprema, como se mencionó antes.