Ahora bien, cada nivel y grado de estos tres —Néfesh, Rúaj y Neshamá— consiste de diez facultades que se corresponden con las Diez Sefirot Supremas, [manifestaciones Divinas, en las que se originan y] de las cuales descienden, que se subdividen en dos [categorías generales]. Estas son: tres "madres" y siete "dobles". A saber: Jojmá ("sabiduría"), Biná ("entendimiento") y Dáat ("comprensión"); y [las siete "dobles" son los atributos emocionales conocidos como] los "siete días de la Creación": Jésed ("bondad"), Guevurá ("severidad"), Tiféret ("belleza"), y así sucesivamente.
Así también, [tal como las Diez Sefirot Supremas se dividen en dos categorías generales, del mismo modo] el alma humana [y sus diez facultades]; están divididas en dos [categorías generales]: séjel ("intelecto") y midot ("atributos emocionales"). El [plano de] intelecto incluye [los tres poderes intelectuales de] Jojmá, Biná y Dáat (JaBaD), mientras que las midot son el amor a Di-s, el miedo y el temor a El, la glorificación de El, y así sucesivamente. JaBaD, [las facultades intelectuales,] son llamadas las "madres" y fuente de las midot, porque las midot son los "descendientes", [o sea, se derivan] de JaBaD.
La explicación del tema es la siguiente:
Aquella facultad intelectual del alma racional que concibe [primero] cualquier tema recibe la denominación de Jojmá [palabra compuesta por otras dos:] כ״ח מ״ה — el "potencial de ¿qué es?" Cuando la persona manifiesta [esta idea concentrada] de lo potencial hacia lo actual, es decir, cuando reflexiona con su intelecto [acerca del punto seminal] a fin de comprender un asunto plenamente y ahonda en él hasta su mayor profundidad tal como éste evoluciona del concepto que él ya había concebido en su intelecto, esto es denominado Biná. Ellos [jojmá y biná] son los mismísimos "padre" y "madre" que hacen nacer el amor a Di-s, y el temor (irá), y el miedo (pájad) hacia El.