En cuanto a la afirmación talmúdica8 de que si uno ve que su semejante peca debe odiarlo, y también debe decírselo a su maestro para que también él lo odie — esto se aplica únicamente al propio compañero, [su par e igual] en el estudio de la Torá y la observancia de las mitzvot, y también cuando él mismo ha cumplido [con el pecador] el mandato de: "Reprenderás repetidamente a tu amigo", 'aquel que está en un mismo nivel que tú en la Torá y las mitzvot, como está escrito en Sefer Jaredím.