"La recompensa de una mitzvá es la mitzvá misma". Esto significa que podemos conocer la naturaleza esencial el rango [de la mitzvá] por su recompensa. Ahora bien, no nos ocuparemos con [la explicación de] cuestiones ocultas, o sea, de los grandes tzadikím que están en el nivel de "carroza", sino solamente con aquellas cuestiones reveladas a nosotros, a las que todo hombre debe aspirar: saber con certeza que la naturaleza esencial y el rango del servicio Divino con temor y amor manifiestos en el corazón, derivados del entendimiento y la comprensión de la grandeza del bendito Ein Sof, [de su recompensa sabemos] que su lugar es en las Diez Sefirot de Beriá; el servicio [cuya motivación surge] del temor el amor natural [oculto] en la mente, [servicio del que se dijo antes que es recompensado en el Mundo de Ietzirá — de esta recompensa sabemos que] su lugar está en las Diez Sefirot de Ietzirá. Pero el servicio Divino llevado a cabo sin despertar el temor y el amor [para que esté] en un estado manifiesto en la mente —o sea, [un servicio realizado sin] despertar el amor natural oculto en el corazón de ma nera que emerja de los recónditos recovecos del corazón para que esté revelado al menos en la mente [consciente] y en lo recóndito del corazón— [y,] en lugar de ello, [el amor] permanece oculto en el corazón como en su estado natal, como estaba antes de su servicio Divino — un servicio como éste permanece abajo, en este "Mundo de Separación", [el nivel] denominado "lo externo de los mundos"; no tiene el poder para elevarse y para ser absorbido en Su bendita Unidad, que son las Diez sagradas Sefirot, como está escrito en Tikuním que "sin temor y amor no se alza en vuelo ni puede ascender para estar ante Di-s".
ב"ה