Y hay [incluso] otro camino recto, [que es] igualmente aplicable [y adecuado] a todo hombre, y [esta cuestión] es muy, muy cercana, para despertar y encender la luz del amor que está implantado oculto en su corazón, a fin de que pueda brillar con su intensa luz, como fuego llameante, en la concientización de su corazon y mente, para [permitirle, en última instancia,] entregar su alma a Di-s junto con su cuerpo y posesiones [materiales] con todo su corazón, con toda su alma y con toda su "fuerza", de lo profundo de su corazón, con absoluta sinceridad, y especialmente en el momento de la Lectura del Shemá y sus bendiciones, como se explicará [luego].

Y ésta [técnica para revelar este amor] es: cuando lleve a su corazón el significado del versículo: "Como el agua [refleja] el rostro al rostro, así [lo hace] el corazón del hombre con el hombre". Esto significa que tal como [en el caso de] la imagen y los rasgos del rostro que el hombre muestra en el agua, [instancia en la que] el mismo e idéntico rostro es reflejado hacia él desde el agua, así también es realmente el corazón del hombre que es leal en su afecto por otra persona, porque este amor [que él siente por el otro] despierta también una respuesta de amor hacia él en el corazón de su amigo, de manera que se amen mutua y lealmente, especialmente cuando va [revelado] el amor de su amigo por él.

Tal es la naturaleza común en el carácter de todo hombre, aun cuando [ambos] son iguales en rango. Cuánto más [es así] cuando un rey grande y poderoso [que gobierna sobre muchas tierras] exhibe su grande e intenso amor por un plebeyo que es despreciado y humilde entre los hombres, una criatura desgraciada echada sobre el basural, no obstante, [el rey] desciende a él desde el sitial de su gloria, junto con todo su séquito, y lo alza y exalta del basural y lo trae a su palacio, el palacio real, [y dentro de éste lo conduce] hasta la cámara más interior, un lugar al que jamás entran ni siervo ni noble, y allí comparte con él la compañía más personal, con [mutuos] abrazos y besos y unión de "espíritu con espíritu", con todo el corazón y alma de ellos —[entonces, cuando un rey poderoso muestra semejante inmenso afecto y camaradería a una persona tan inferior,] cuánto más que se despertará, por sí mismo, un amor doble y redoblado en el corazón de este por demás común y humilde individuo por la persona del rey, con una genuina unión de espíritu, de corazón y alma, de la infinita profundidad de su corazón. Aun si su corazón fuera como un corazón de piedra, de seguro se derretirá y volverá [cual] agua, y su alma se derramará como agua, con ansiedad del alma por el amor del rey.