Aunque la Torá y el Santo, bendito sea, son todo uno —pues El y Su Voluntad son uno [y la Torá representa Su Voluntad—, no obstante, no ascenderá a lo Alto sin kavaná]. El Santo, bendito sea, llena todos los mundos por igual pero, no obstante ello, los mundos no son todos de igual categoría. La diferencia [entre un mundo y otro] se debe a los recipientes [de la fuerza vital Divina] y es en dos aspectos: (1) Los [mundos y seres] superiores reciben una iluminación infinitamente mayor que [la recibida por] los inferiores; (2) [los superiores la] reciben sin tantas vestimentas y velos como los inferiores. Este mundo es el más bajo en ambos aspectos, pues (1) la iluminación [de fuerza vital Divina] dentro de él es enormemente contraída, hasta su máximo límite; por eso es corpóreo y material. Lo que es más, (2) incluso ésta [iluminación contraída] está en numerosas vestimentas y velos, hasta investirse en kelipat noga para dar vida a todas las cosas puras que hay en este mundo, incluyendo el alma vitalizadora inteligente en el hombre. Por eso, cuando [el alma vitalizadora] pronuncia palabras de Torá y de plegaria sin kavaná [está ausente el carácter ocultador de este mundo, pero la contracción todavía es aplicable, de la siguiente manera:] aunque éstas son letras sagradas y [por eso, en este caso,] la kelipat noga del alma vitalizadora no constituye un velo de separación que oculte o cubra la Divina santidad investida en ellas tal como oculta y cubre la Divina santidad en el alma vitalizadora cuando habla charlas banales y [la Divina santidad] en las almas vitalizadoras de otras criaturas vivientes [ritualmente] puras —pues a pesar de que "ningún lugar está desocupado de El", sin embargo, El es "el más Oculto de todos los ocultos" y es llamado "un Di-s oculto" [pues El está oculto a Sus creaciones], y también la iluminación y extensión de vitalidad de El está oculta en muchas densas vestimentas y velos, y es finalmente investida y ocultada en la vestimenta de noga— es diferente, sin embargo, con las santas letras en palabras de Torá y plegaria: [la kelipá no sólo no oscurece la Divinidad, sino que] por el contrario, kelipat noga es transformada en bien y es absorbida dentro de esta santidad, como se explica antes. No obstante, la iluminación de Su santidad que contienen [esta palabras] está contraída hasta su máximo límite, dado que la voz y el habla [articulando palabras de Torá y plegaria] son materiales.