Ahora bien "La consumada belleza de Iaacov se asemeja a la consumada belleza de Adám", pues él rectificó el pecado de Adám. También su alma contuvo todas las almas de Israel, "de mundo a mundo". Lo que es más, fue un vehículo para la Torá en su estado celestial, la que es llamada "Adám", como está escrito: "Y en la semejanza del trono había una semejanza como la apariencia de Adám". Y como está escrito: "Y ésta (vezot) fue la costumbre en tiempos de antaño en Israel...", y "zot se refiere sólo a la Torá". Pues la Torá fue contenida e investida dentro del alma de "Israel, el Patriarca", quien combinó todas las almas.
[Además, Iaacov —o "Israel, el Patriarca"— fue un recipiente capaz de recibir la radiación de la Torá. Así] éste es el significado de [la frase citada antes,] "Y lo llamó a El: El, Di-s de Israel": [Dado que el Nombre El denota el atributo Divino de jésed, el que encuentra expresión en el deseo de Di-s de comunicar Su luz oculta, el uso de] el Nombre El [por parte de Iaacov] significa atraer [—el hombre—] la radiación de la [infinita] luz Ein Sof [investida en la Torá], del ocultamiento a la manifestación, de modo que brille manifiestamente en el alma del hombre. Así, también, está escrito: "El es el Señor, y El nos ha dado luz", [indicando, análogamente, que el Nombre Divino El denota iluminación] y, tras él [—Iaacov—], la [infinita] luz Ein Sof brilla abiertamente en las almas de todos los rectos de corazón que se abocan a la Torá y las mitzvot.
La más elevadora y poderosa manifestación de esta radiación [Divina] en su mente y corazón tiene lugar en el momento de la plegaria, como está explicado en otra parte.