Nuestros Sabios enumeraron varias cosas en cuyo mérito los hijos de Israel fueron liberados de Egipto. Entre ellos: La fe (en la redención), la sangre del sacrificio pascual y la sangre de la circuncisión. A simple vista se trata de dos elementos diferentes y desconectados entre sí, sin embargo, profundizando en el tema vemos que todos conforman una unidad perfecta.

La salida de Egipto constituía un suceso imposible. Se trataba de una super- potencia, que dominaba de manera absoluta, al punto que nuestros Sabios dijeron que "incluso un solo esclavo no podía escapar de Egipto". También desde la óptica espiritual del tema, no había posibilidad para el éxodo de Egipto, puesto que los israelitas estaban inmersos en los 49 pórticos de impureza, como dicen nuestros Sabios: "Estos son idólatras y estos son idólatras". Siendo así, ¿en mérito a qué merecían ser liberados?

Amor Sin Cuestionamientos

Lo que ocurrió fue que aquí se reveló el amor interno de Hashem, que fluye de Su Esencia, Bendito Sea. Este es un amor como el amor de un padre para con su hijo, que no requiere de causas especiales, y frente al cual ningún interrogante o pregunta puede obstruir. Cuando se reveló este amor, el hecho que los israelitas se encontraban en el nivel más bajo no generó perturbación ni interferencia. "El Santo, Bendito Sea, en Su Gloria y Esencia" (que se refiere a la Divinidad como se encuentra por encima de la estructura de los mundos) se reveló para liberarlos".

Elevarse por Encima de los Cálculos

La fe gestó la base para la redención, pero aun era necesario expresarla en los hechos y no relegarla sólo al plano de una fe en el corazón. La expresión práctica de esta fe supra racional tuco lugar por medio de la ofrenda del sacrificio pascual y la sangre de la circuncisión.

También la ofrenda del Pesaj requería sobreponerse a los cálculos lógicos racionales. La oveja era la deidad egipcia y su ofrenda podía ser malinterpretada, y con justicia, como una incitación a los egipcios y un ataque a su fe. Sin embargo, los israelitas actuaron con entrega y auto sacrificio (una propiedad del alma superior a la lógica), y cumplieron con el precepto sin tomar en cuenta ningún cálculo racional.

Una Unidad

Asimismo el pacto de la circuncisión es fundamentalmente un precepto superior a la lógica. ¿Qué vínculo racional puede generarse entre un pequeño bebé y el Altísimo? Sólo que la circuncisión expresa el pacto esencial existente entre la propia esencia del judío y Hashem, un vínculo que es de raíz supra- racional.

Estos tres elementos que expresan todos una dimensión superior a la lógica, conforman en su conjunto una unidad: la fe representa la supra racionalidad del alma; la circuncisión simboliza la penetración de la fe en el cuerpo; y el sacrificio pascual- la integración de la fe al ámbito que rodea al hombre. En mérito a todos ellos, los judíos se hicieron acreedores de ser liberados de Egipto, y es éste, también, el camino para llegar a la verdadera y completa redención, a través de nuestro justo Mashíaj.

(Likutei Sijot tomo III, pág. 864)