En mi segunda audiencia con el Rebe, de bendita memoria, el 30 de enero de 1969, le mencioné que un familiar mío estaba en pareja con una persona no judía.

El Rebe me respondió

“Cuando existe una relación de ese estilo, lo más importante es no lastimar a la otra persona. En estos casos, no tiene sentido hablar o sermonear al otro. Lo que debemos hacer es ofrecer una alternativa práctica. Por eso, es necesario que encuentres en Londres una pareja ideal entre tus amigos o los amigos de la familia. Una vez que hayas encontrado a esa persona, entonces, deberás sugerírselo a tu familiar para que, de este modo, decida terminar su relación con la persona no judía”.