Mucho antes de que alguien soñara con un motor a vapor o una bombilla de luz, el Zohar predecía una era en la que el mundo sería colmado por sabiduría inferior y sabiduría superior.
Todo comenzó con Noaj y el Diluvio Universal: “en el año seiscientos de la vida de Noaj… todas las fuentes de agua de las profundidades emergieron y la sabiduría de los cielos se abrió…”.
El Zohar lo interpreta de la siguiente forma: “En el año seiscientos del sexto milenio las puertas de la sabiduría superior y las fuentes de sabiduría inferior se abrirán, y el mundo se preparará para ingresar en el séptimo milenio, al igual que las personas se preparan en la noche previa a Shabat para que éste llegue”.
¿Cuándo fue el año seiscientos del sexto milenio? Corresponde al año 5600 del calendario hebreo. Según el calendario gregoriano, corresponde al año 1840.
Ahora bien, esa no parece ser una fecha significativa. Sin embargo, corresponde a un año de quiebre en la historia de la humanidad.
El siguiente grafico muestra la relación entre los descubrimientos y las invenciones en relación a la población mundial. ¿Pueden adivinar qué década se destaca? La década de 1840. Sí, la lluvia comenzaba a descender al menos un siglo antes. Pero para esa fecha, las compuertas se abrieron de par en par.
Las fuentes de sabiduría inferior a las que se refiere el Zohar resultaron ser la tecnología, la ciencia y las comunicaciones a distancia que se desarrollaron a gran escala como nunca antes en la historia. Algo que llamamos Revolución industrial. Y eso dio origen a un mundo completamente nuevo.
¿Es esto una exageración? El grafico siguiente muestra la riqueza que las personas comenzaron a acumular desde principios de la era común hasta la actualidad. Observarán que no parece haber grandes fluctuaciones a lo largo de la mayor parte del gráfico. Eso es porque, durante la mayor parte del tiempo, las personas apenas contaban con aquello que necesitaban para sobrevivir, lo que equivale a una ganancia de 200 dólares al año.
Y de pronto la riqueza, la salud y la calidad de vida se disparan, como en una explosión, justo para el momento que predice el Zohar.
Pero ¿qué tienen que ver la tecnología, la ciencia y la comunicación a distancia con “preparar al mundo para entrar en el séptimo milenio”?
El séptimo milenio es una era en la cual el universo descubre su propia unicidad, la cual a su vez expresa la unicidad del creador. Por ende, no estamos haciendo referencia a una revelación que provenga del cielo, sino a la apertura del mundo a sus propias verdades.
Para que eso acontezca, debe descender cierta sabiduría superior, lo cual comenzó con el Baal Shem Tov, cien años antes de 1840. Pero, junto con eso, las fuentes de sabiduría inferior deben abrirse. Y eso se produce por medio de la ciencia y la tecnología: una nueva forma de ciencia que descubre la unicidad por dondequiera que mira, y una nueva forma de tecnología que nos une a todos en uno solo.
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