Empezamos esta semana recordando la destrucción del Templo en Tisha BeAv, y salimos finalmente de las tres semanas de duelo.
Esta noche festejamos Tu BeAv, un festival que se realizaba en la época que el Templo estaba en pie. En este día, las doncellas de Jerusalem salían ataviadas de ropas blancas y simples y les decían a los jóvenes pretendientes, "Joven, no mires el recipiente sino mira su contenido" de este modo se formaban parejas en todos los ámbitos de la sociedad hebrea.
Hay un pequeño pero importante mensaje que podemos rescatar de esta antigua costumbre. Al salir de las tres semanas de duelo, no podemos más que mirar a nuestro alrededor y sentir tristeza al ver cuán profundamente imbuidos estamos en el exilio y cuan alejados estamos de la época en la cual uno podía percibir la santidad con sus propios ojos.
Pero ahí viene el mensaje del 15 de Av, justo al salir del duelo debemos dejar de mirar el recipiente, dejar de ver la corteza exterior de las cosas, debemos enfocarnos en las cosas positivas que hay nuestro alrededor y descubrir en ellas la cercanía a la divinidad. El Rebe de Lubavitch dijo una y otra vez: "El mundo está preparado para la redención tan solo hace falta que abramos los ojos".
Estoy seguro que si focalizamos correctamente podremos ver cuán cerca estamos de la pronta llegada del Mashiaj. Amen.
¡Shabat Shalom!
Rabino Eli Levy
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