Estimados lectores:

Este año emigre. A la tierra de Israel.

“A la tierra que te mostraré” Según el primer versículo de nuestra porción semanal.

Di-s le promete a Abraham grandes bendiciones, pero debe abandonar su zona de confort, la casa de su padre y viajar a lo desconocido, a la tierra que te mostraré, ni siquiera sabe que tierra es, lo único que Abraham tiene es la promesa de Di-s.

Israel tiene algo que no tiene otra tierra, los ojos de Di-s están siempre sobre esta tierra, que es pequeña y está justo entre oriente y occidente. En la actualidad es un lugar pujante, que cada año crece, a pesar de sus problemas se vive bien y más que nada se siente la providencia divina en cada paso.

El inmigrante por naturaleza está lleno de incertidumbre, no sabe lo que le espera, tiene esperanza y fe, pero lo lógico es que al principio no lo conozca nadie, que no pueda hacer mucho dinero, mucho menos hacerse exitoso. Pero la bendición de Di-s a Abraham es justamente que va a tener éxito a pesar de irse de su lugar y si él tenía fe completa en Di-s.

Él nos abrió el camino a todos los inmigrantes judíos a lo largo de la historia y aún más a los que retornamos a nuestra tierra ancestral. Este año lo siento más fuerte que nunca, no llegue desde Ur en camello, llegue desde Buenos Aires en avión, pero siento que se cumple la promesa divina a mi padre Abraham, en mí y en todos los Olim del mundo que llegamos con fe que esta es la tierra que tiene la bendición de Di-s para todos nosotros.

¡Shabat Shalom!

Rabino Eli Levy