"Si ves el burro de tu enemigo caído bajo su carga, podrías querer abstenerte de ayudarlo; (sin embargo), ciertamente debes ayudarlo a levantarse" (Shemot 23:5).

Rabí Shneur Zalman de Liadi, antes de ser conocido como el Alter Rebe, primer líder de Jabad, viajó para recaudar fondos con el propósito de apoyar una causa caritativa importante. Llegó a la casa de un hombre rico, quien, al darse cuenta de que no era un recolector común, le ofreció quedarse y enseñar a sus hijos a cambio de la suma total que esperaba recaudar.

Tras una breve estadía, Rabí Shneur Zalman le informó al rico que se marcharía porque no podía tolerar la conducta de la gente de la ciudad. Su anfitrión, sorprendido, le preguntó a qué se refería, y el rabino respondió: "Ustedes torturan al pobre".

El benefactor pensó que hablaba de una reunión reciente en la que se había decidido cómo recaudar dinero para un impuesto. Se había acordado que primero los pobres debían dar tanto como pudieran y que lo que faltara sería completado por los ricos. Reflexionando, se dio cuenta de que Rabí Shneur Zalman tenía razón: los pobres no deberían ser molestados en absoluto. En consecuencia, organizó una segunda reunión en la que se decidió que los ricos donarían primero lo que pudieran.

Pocos días después, Rabí Shneur Zalman volvió a anunciar que se marchaba y repitió: "Ustedes torturan al pobre".

Asombrado, el rico le recordó la nueva resolución que aseguraba que los pobres no serían molestados. Sin embargo, el rabino explicó que no tenía conocimiento de esas reuniones y que se refería a otra cuestión:

"En el cuerpo humano hay órganos 'ricos' y órganos 'pobres'. Los órganos 'ricos' son la mente y el corazón, mientras que el órgano 'pobre' es el estómago. En esta ciudad, en lugar de enfocarse en los órganos ricos y utilizarlos para el estudio de la Torá y la plegaria a D-os, el método que siguen es el ayuno constante. Así, el órgano 'pobre', el estómago, es privado de lo que necesita y sufre debido a las iniquidades de las personas. ¡No puedo tolerar este método!"

Esta visión era novedosa para el rico, quien le preguntó al rabino cuál era su fuente. Rabí Shneur Zalman le habló del Baal Shem Tov y sus enseñanzas, que enfatizan el trabajo de la mente y el corazón en lugar de castigar al cuerpo.

"El Baal Shem Tov basa este enfoque en un versículo de la sección de Mishpatim en la Torá y lo interpreta así:

'Si ves que el jamor (burro) –que simboliza la materia física del cuerpo, ya que proviene de la palabra jomer– es tu enemigo porque está ocupado en la búsqueda de placeres físicos y, por lo tanto, se opone al alma, la cual aspira a la Divinidad y un nivel espiritual más elevado, y ves que el cuerpo "cae bajo su propia carga", negándose a elevarse y servir a D-os, podrías pensar en abstenerte de ayudarlo; podrías creer que la solución es torturarlo y privarlo de alimento. Pero debes saber que ese enfoque es incorrecto. Por el contrario, seguramente debes ayudarlo, brindándole sus necesidades físicas y, al mismo tiempo, refinando la mente y el alma para servir a D-os. Eventualmente, tu cuerpo se purificará y colaborará con tu servicio Divino'."