¿Qué marca la ley para quien cometió un homicidio no intencional?. La Torá dispone que este homicida debe escapar a una de las ciudades de refugio y establecerse ahí “hasta la muerte del Sumo Sacerdote”. Mientras que el Cohen Gadol vive, está prohibido para el homicida abandonar la ciudad, y sólo luego de fallecer el Cohén Gadol, estaba autorizado a regresar a casa.

Esta relación entre el castigo al homicida no intencional con la vida del Sumo Sacerdote requiere una explicación. ¿Qué tiene que ver un homicida con la extensión de la vida del Cohen Gadol?

Rashi responde de la siguiente manera: El Sumo Sacerdote está para hacer residir la Shjiná en el seno del pueblo de Israel y para alargar sus días, mientras que el homicida viene a apartar la Presencia Divina de Israel y acortar sus días; no corresponde que esté frente al Cohen Gadol”.

Sin embargo, Rashi no se da por satisfecho con este comentario y trae una explicación más: “debido a que el Cohen Gadol debería haber rezado que no ocurra un accidente como este a Israel mientras él vive”. Pero esta explicación, a simple vista, no es entendible: aquí el castigo no viene a penar al Sumo Sacerdote, sino al homicida, entonces ¿qué es eso que lo culpamos por que “debería haber rezado”?. Sólo que aquí Rashi viene a explicar la relación profunda que existe entre ambos temas. El hecho de que la Torá vincula al castigo del homicida no- intencional con la muerte del Sumo Sacerdote prueba que no se trata tan sólo de un condicionamiento técnico entre dos cosas distintas, sino que hay una relación interna conceptual entre ambas.

El homicida no está autorizado a abandonar la ciudad de refugio mientras que el Sumo Sacerdote vive, debido a que su pecado aún no fue expiado. Sólo con el fallecimiento del Cohen Gadol logra la expiación por su acto. Tal como “la muerte de los Tzadikim (justos) expía” sobre toda la generación, así también la muerte del Sumo Sacerdote expía por el pecado de homicidio no intencional.

Pero aquí surge la pregunta: ¿por qué justo la muerte del Cohen Gadol expía por este homicidio y no la del fallecimiento de otro Tzadik (justo)?. A eso responde Rashi: “Porque debería haber rezado”.

Es decir, la función espiritual del Cohen Gadol es irradiar una santidad tan intensa sobre el pueblo de Israel, hasta que ni siquiera exista la posibilidad de sucesos como este. Y siendo que tal acto ocurrió en su vida, en cierta medida esto también depende de él, por eso Hashem dispuso que sea su muerte específicamente la que expiara completamente por un acto de homicidio.

De aquí aprendemos una lección extraordinaria en el tema del amor al prójimo judío: el Sumo Sacerdote y el homicida representan los dos polos más extremos- la santidad y la pureza por un lado y la cúspide de la bajeza y el pecado por el otro (siendo que el homicida no- intencional posee el status más grave y severo entre los pecadores que no son plausibles de pena capital). Sin embargo, ambos dependen el uno del otro, puesto que también estos dos extremos son parte de un mismo pueblo.

El Cohen Gadol- el continuador de Aharón el Sacerdote, que era “amante de las criaturas”4 debe por un lado, “alargar los días” de los judíos, y por el otro, rezar para que no ocurra ningún accidente incluso a través del más inferior entre ellos. Esa es la función del Cohen Gadol de cada generación, y su Plegaria es recibida, para que sólo la bondad y el bienestar estén para el pueblo de Israel por siempre.

(Likutei Sijot Tomo 33, Pág. 206)