Es el precepto con el cual se nos ordenó que el pueblo todo se reúna en el (día) segundo de Sucot de todo año posterior al de Shemitá, y que sean leídos delante de ellos algunos versículos de "Mishné Torá".

Es lo que El, exaltado sea, dijo: Reúne al pueblo, los hombres, las mujeres y los infantes... Este es el Precepto de Hakhel.

Al comienzo (del Tratado Talmúdico) de Kidushín, cuando dijeron: "Las mujeres están exentas de todo Precepto Positivo que es provocado por el tiempo", preguntaron en el Talmud y dijeron: "¿(Cómo puede decirse así) si Hakhel, que es un Precepto Positivo provocado por el tiempo, es obligación (también) para las mujeres?" Y al fin del tema se arribó a la conclusión: "No se aprende de lo Global".

Las leyes de este precepto —me refiero a cómo se ha de leer, quién ha de leer, y qué ha de leer— ya han sido explicadas en el Capítulo Séptimo del Tratado (Talmúdico) de Sotá.