Es el precepto con el cual se nos ordenó desterrar de su ciudad a quien mata involuntariamente, a las Ciudades de Refugio.

Es lo que El, exaltado sea, dijo: Y permanecerá allí hasta la muerte del Sumo Sacerdote. En expresión del Sifrí: "Y permanecerá allí — no sale de allí, jamás, pues fue dicho allí: allí será su morada, allí morirá, allí será enterrado".

Todas las leyes de este precepto han sido explicadas ya en el Tratado (Talmúdico) de Makot.