Al final de toda comida con pan, concluimos con birkat hamazon, el agradecimiento después de la comida. En Shabat agregamos un párrafo que habla de la singularidad de este día y una plegaria para que nuestro "saboreo del Mundo Venidero" semanal nos traiga "al día que será totalmente Shabat, para la vida eterna" —la era del Mashiaj.