Dicen nuestros sabios que una pregunta sabia es la mitad de la respuesta.

Quiero compartir aquí algunos ejemplos. Hace unos días tuve la ocasión de presenciar la dedicación de la lápida de una joven mujer, que murió apenas unos días después de dar a luz a su primer hijo.

Era una mujer querida por todos. Era una persona que no solo tenía una sonrisa para todos, sino que supo generarle una sonrisa a cada persona que entraba en su órbita. Su fallecimiento repentino produjo un shock en todos quienes la conocimos.

Un año más tarde, ahí estábamos, en el Cementerio Israelita de La Paz, frente a la lápida que marcaba su lugar de descanso.

Entre los que hablaron, habló su hermano y de una manera muy elocuente y sentida expresó sus quejas para con D-os por habernos arrancado a Silvana antes de tiempo.

Después me tocó a mi decir unas palabras.

Expresé mi identificación con la queja de Marcel, ya que cuanto más creyente es uno tanto más corresponde protestar ante las aparentes injusticias. De todas maneras, aclaré, no había que permitir que la pregunta "¿Por qué murió?" nos distraiga de una pregunta más importante: "¿Por qué vivo yo?"

¿Por qué es más válido hacerse la segunda pregunta que la primera? La respuesta es muy sencilla: La primera no tiene respuesta, la segunda sí.


Hace unas semanas el filántropo Michael Steinhardt dio una conferencia sobre el estado del pueblo judío en el mundo hoy en día.

Dijo muchas cosas muy interesantes e inteligentes. Lo que más me impactó fue lo que es, a mi entender, la pregunta central de su exposición: ¿podemos crear un sistema educativo que haga que los judíos sean orgullosos, inspirados, informados y apasionados para con quiénes y qué son?

Un desafío muy importante, por cierto. Pero, nuevamente, hay que hacerse otra pregunta para poder responder a esta: ¿Qué quiere decir "ser judío"?

Cuando hablamos de "educación judía" hay que saber distinguir entre educación judía y educación de judíos.

¿Tener maestros y profesores judíos quienes educan a alumnos judíos de una manera no judía se puede denominar educación judía?

Claro, la pregunta es: ¿Quién define qué es lo que constituye una educación "judía"?

No es este el espacio para responder a esta pregunta; simplemente quiero señalar que es imprescindible tener claro cuál es la pregunta antes de buscar la respuesta.

Hay que saber definir primero qué es una educación judía para poder buscar la manera de proveerla, ya que si uno no sabe para dónde va, cualquier camino le sirve...


El 15 de noviembre tuvo lugar una actividad inédita en la historia del Uruguay: la 1era Jornada Comunitaria. Por primera vez en la historia todas las instituciones judías fueron invitadas a participar - como pares - de un día de análisis y reflexión sobre temas que nos conciernen a todos.

Creo que más que por las respuestas ahí ofrecidas, fue importante por las preguntas planteadas.... El sabio no es aquel que tiene todas las respuestas, sino el que tiene la necesidad de preguntar y buscarlas.

Pero, hay que estar atento. Si bien tener las ganas de preguntar es siempre válido, no todas las preguntas son válidas. A veces las preguntas son nada más que excusas y pretextos para no hacer lo que uno debe hacer. ¿Qué define cuál es la pregunta válida y cuál no la es? Pues ahí tiene un ejemplo de una pregunta válida.... :)

A mi entender, una pregunta válida es la que busca definir qué y cómo hacer; la no válida es la que busca cómo y qué no hacer.


Ese mismo fin de semana tuvo lugar, en Nueva York, la conferencia anual de mis colegas a nivel mundial.

Durante cinco días, en plenarios y talleres, unos 3.000 shlujim (emisarios) del Rebe de Lubavitch hablaron y analizaron la situación en sus respectivas comunidades y cómo mejorar su gestión.

El encuentro empezó con un acto de compleción y dedicación de un Séfer Torá que fue escrito especialmente en memoria de los Shlujim Gaby y Rivki Holtzberg, quienes fueron masacrados en el ataque terrorista contra su Beit Jabad en Mumbai, India, el año pasado. Dicho acto conmemorativo, si bien empezó con serenidad y seriedad, terminó en una irrupción espontánea de bailes y alegría.

¿A qué se debió ese cambio de estado de ánimo? Entiendo que fue consecuencia del traspaso de la pregunta estéril de "¿por qué?" a la pregunta fecunda de "y, ¿ahora qué?". Fecunda, porque invita y da lugar a las infinitas respuestas que se encuentran en manos de cada uno de nosotros cuando optamos por transformar el fuego negativo y destructivo de Mumbai en millones de puntos de luz positivos y constructivos en todo el mundo.

Con los mejores deseos por unas vacaciones inspiradoras y reparadoras.

P. D. No podía terminar este artículo sin La Pregunta para las vacaciones: ¿Cómo se hace para transformar vacaciones improductivas en vacaciones productivas?

(Quizás el pensar en la respuesta a esta pregunta ya es un buen comienzo....).