El significado simple de la palabra mitzvá es “orden”. Esta palabra figura alrededor de trescientas veces en distintas formas, con ese mismo significado, en los Cinco Libros de Moisés.
La verdadera briá no surge a partir de un antecedente, ni siquiera sugiere la posibilidad de un antecedente, sino que es algo absolutamente nuevo, un fenómeno totalmente sin precedentes.
Lo más desconcertante de la Divinidad es que puede ocultarse. La verdadera realidad de todo lo que existe puede ocultarse dentro de las mismas criaturas que surgen de esa realidad.
A partir de los textos bíblicos, talmúdicos y midráshicos, surge una visión de Di-s según la cual Él participa muy de cerca en cada detalle de Sus obras.
Al fin y al cabo, la vida no es algo que uno recibe como si fuera una marioneta, no la recibe a través de la mano de otro. La vida es algo esencial a la persona misma
Hasta ese momento, en el mundo judío reinaba un orden jerárquico, los eruditos en la cima, el judío simple por debajo y los iletrados eran solamente judíos en términos nominales, pero no más que eso.
Generalmente, se traduce como "confianza". La bitajón es un poderoso sentimiento de optimismo y de confianza basado no en la razón ni en la experiencia, sino en la emuná. Tú sabes que "Di-s es bueno y Él es el único que está a cargo de todo" y, por lo tanto, no tienes miedos ni incertidumbres.
El otro día me di cuenta de que hacía bastante tiempo que no lo veía, probablemente desde mi niñez. Y el problema no es sólo que no puedo encontrar a Di-s.
Una visión general de las creencias judías fundamentales sobre la recompensa y el más allá
Por Tzvi Freeman
Sí, los judíos creen en una vida después de la muerte en un mundo más allá del que viven actualmente, a veces denominado “el cielo”. Una rica tradición nos informa que hay una continuación de esta vida que da sentido a todo lo que está pasando en este episodio.
Tradicionalmente, un baal teshuvá es alguien que dejó el buen camino y ahora ha regresado. Pero en realidad, todos estamos retornando constantemente. O, al menos, deberíamos estarlo.
El libre albedrío en el judaísmo es la capacidad de elegir entre diferentes cursos de acciones, palabras o pensamientos, no debido a influencias externas, naturaleza interna o cualquier tipo de preferencia personal. Simplemente una elección equilibrada entre el bien y el mal.