Dice en la Torá (Génesis 17)... Y a los 8 días circuncidareis todo varón de vuestras generaciones. Es decir que el 8° día se cumplen 2 preceptos: uno el Berit propiamente dicho y el otro el hecho de realizarlo el 8º día.

¿Porqué la Torá exige exactamente el 8° día?. Citaremos algunos motivos.

Explican los sabios que en realidad la Mitzvá debería realizarse el primer día del nacimiento del niño, pues ningún ser quisiera estar despojado de un tesoro tan valioso, como el alma que se recibe en el momento del Berit, aún siquiera por un instante, y con qué derecho se lo impediríamos por el lapso de 8 días?

La 1° respuesta es como citan las escrituras sagradas que D"s tuvo compasión y piedad del pequeño hasta que su estado físico sea adecuado para tolerar perfectamente la intervención, y normalmente los bebés alcanzan un óptimo estado a los 8 días; por lo cual si el bebé presentara algún cuadro dudoso o afección física por mínima que fuere, se debe esperar su total restablecimiento el tiempo necesario. Los 8 días se contabilizan incluyendo el día del nacimiento que se considera hasta la puesta del sol. Es decir si el día lunes el sol se pone (se va) a las 18:00hs, y el niño nació antes de ese horario aunque sea un minuto ya se considera que tiene 1 día para la cuenta y se deberá realizar el Berit el lunes siguiente que se cumplirán los 8 días, aun desde las primeras horas de la mañana. Si el nacimiento fuera después de la puesta del sol ya se considera como el día posterior, en nuestro ejemplo, martes, y se deberá realizar el martes siguiente. A pesar de que el Berit Milá cuando se cumplen los 8 días se realiza aun en Shabat, Iom Kipur o cualquier día festivo, en esos casos se debe consultar con una autoridad competente las condiciones necesarias para su eventual ejecución.

El Berit según la Torá se realiza únicamente de día, desde la salida hasta la puesta del sol, tenga el bebé 8 o más días.

La 2º respuesta:

Como ya lo hemos nombrado en el capítulo 3 el Berit es lo más importante de la creación, lo que implica una elevación por sobre la naturaleza en todo aspecto, pues la creación se realizó en 7 días, que también es el n° de los días de la semana; el Shabat, testimonio de la creación Divina del universo, es también el séptimo; el ciclo de la Shemitá, año de descanso de la tierra es también el séptimo; el Jubileo, en el año n° 50, se ordena luego de 49 años o sea 7 descansos de la tierra. En estos pocos ejemplos comprobamos la reiteración del 7° en varios órdenes de suma importancia, el único con numeración 8 º es el Berit, pues realmente se sitúa trascendentalmente por sobre toda la creación y todo lo natural, para ubicarse en el plano espiritual.

El 8º día es el más apto clínicamente para el Berit Milá.(ver observaciones, dolor)

Berit de adultos

Como ya hemos mencionado en el capítulo 3, la obligación de la Mitzvá corresponde al padre hasta que el niño llegue a los 13 años, a partir de lo cuál el nuevo joven es mayor de edad para la Torá y por consiguiente responsable de su propio Berit en lo sucesivo.

Así como un circunciso acumula méritos en cada instante de su vida por el solo hecho de tener grabada en su cuerpo la Señal del Pacto, el incircunciso está cometiendo una falta muy grave hacia D"s por cada instante que no se realiza el Berit; pues de esta Mitzvá depende la unión del judío con el Altísimo; es decir mientras no se circuncide no posee ninguna relación con lo Divino.

En otras épocas resultaba complicado efectuar la circuncisión de un adulto, pero en nuestros días contamos con materiales, medicamentos y técnica que simplifican por completo su realización. Es posible perfectamente realizarlo con anestésico local, lo cual posibilita su ejecución en perfecto estado de conciencia e insensibilidad, logrando también un pos- operatorio cómodo y sin molestias, es decir prácticamente un Berit Milá indoloro. También la recuperación es rápida pudiendo el paciente re iniciar su actividad casi normal a las 24hs de la operación.

Cabe observar la necesidad de realizar el Berit de un adulto con un profesional observante de los Mitzvót de la Torá para que éste tenga el valor y contenido adecuado.