En nuestra Parshá aparece el precepto de santificar el nombre de Di-s: "y no profanarán Mi sagrado Nombre, y He de ser santificado en el seno de los Hijos de Israel". Este precepto establece que el judío debe entregarse a la muerte y no renegar de Di-s. Cuando actúa así- se santifica el Nombre de Di-s en el mundo.

Hay dos tipos de Kidush Hashem-santificación del Nombre de Di-s:

1- Cuando la persona se entrega dispuesto a morir, pero en la práctica le sucede un milagro y se salva.

2- Cuando se concreta su muerte j"v.

La pregunta es: ¿con cuál de estas posibilidades se lleva a cabo una mayor santificación del Nombre de Di-s?

El Apego del Hombre

El Rambam sostiene que el Kidush Hashem principal tiene lugar cuando la persona efectivamente pierde la vida j"v en aras de su fe. Esta situación límite demuestra cabalmente la intensidad de la fe del judío en Di-s, al extremo que entrega la vida por no abjurar de su creencia. Este judío santificó el nombre de Hashem y puso de manifiesto a los ojos de todos la fuerza del apego del judío a Di-s en el mundo e hizo palpable a todo nivel de apego a Di-s que posee, que para él vale más que su propia vida. Este es el motivo de que aquellos judíos que fueron víctimas mortales a manos de gobiernos opresores de los judíos y no renegaron de su fe y de sus creencias están en (el Gan Eden en) un nivel de lo más alto.

A diferencia de ello, el Midrash sostiene, que cuando una persona se entrega a la muerte por no abjurar de Di-s y Su Ley, y le sucede un milagro y salva su vida, aquí tiene lugar una santificación del nombre de Di-s mucho mayor. No sólo se puso aquí de manifiesto la entrega absoluta e incondicional del judío, sino que también se reveló la mano de Hashem que socorrió al judío que Le es fiel.

Un Mérito Especial

Más aún: El Midrash ve que hay un mérito especial para que a la persona le ocurra ese milagro. Sobre ello se cita en el Midrash dos ejemplos de Kidush Hashem:

1- Jananiá, Mishael y Azaria que aceptan ser arrojados a un horno encendido y en la práctica les ocurrió un milagro y se salvaron.

2- Marianus, el perverso, que condujo a la muerte a dos hermanos judíos- Papus y Lulianos. Marianus les dijo: "Si ustedes pertenecen al pueblo de Janania, Mishael y Azaria, que venga vuestro Di-s y os salve". Le contestaron los dos: "Janania, Mishael y Azaria eran íntegros (Kesherim) y Nevujadnetzar era apropiado para que se realice un milagro a través suyo. Pero tú, eres un rey perverso, y no eres apropiado para que a través tuyo ocurra un milagro".

A su vez, ellos se calificaron a sí mismos como merecedores de la muerte a manos del Cielo. Y por ende su sentencia de todos modos era la muerte (por eso no necesitan un milagro).

Vemos aquí que cuando el Altísimo realiza un milagro y salva a la persona que se entrega a morir por Kidush Hashem- esa persona posee más mérito y la Santificación del Nombre es más elevada-requiere que se merezca.

A los Ojos de los Pueblos

En lo que sí concuerdan todas las opiniones es que cuando el judío se entrega en aras del Kidush Hashem, está prohibido que piense en la posibilidad de que le ocurrirá un milagro, sino que debe tener la disposición total a morir. De acuerdo al Rambam debe pensar así, puesto que si se salva, ha de faltar en el Kidush Hashem. Y de acuerdo al Midrash- siendo que "todo aquel que se entrega con la intención de que le suceda un milagro, no le hacen un milagro", cuando piensa en el milagro con ello está obstaculizando que se realice el milagro y sea santificado el nombre de Hashem a través del mismo.

Que sea Su voluntad, que a través de analizar y estudiar sobre las Leyes de Kidush Hashem, que nos hagamos meritorios muy pronto a la anulación del Galut, que causa que "Mi Nombre está profanado entre las naciones", y que tenga lugar "Y He de santificar a Mi gran Nombre.... y sabrán las naciones que Yo Soy Hashem", en la verdadera y completa redención.

(Likutei Sijot Tomo 27, Pág. 167)