¿Conocen esos juegos tipo SimEarth o Civilización o La Frontera de Gungan? La idea de un programador de lo que es ser Di-s. Miras hacia abajo, con despego al mundo y tomas decisiones a nivel mundial que impactan globalmente y ves las complicaciones que se suceden. Haces desaparecer animales y vegetación asegurando que la biosfera siga equilibrada y saludable. A veces funciona, a veces es un desastre. Hambre. Catástrofes. Extinción. Todo bien. Cuando te llaman para la cena, apagas la compu y te vas...

Como diseñador de juegos de software, me pregunto cómo habría de rediseñarlo, de modo que tengamos una mejor percepción del Di-s que conocemos en nuestras plegarias y en nuestra vida cotidiana.

¿Cómo sería si, en este juego, pudiera ver no sólo desde mi trono celestial sino desde los ojos de cualquier criatura en el planeta? Podría elegir ser un depredador o una víctima, incluso un gusano, o qué tal una planta o una piedra—y conocer la vida desde adentro de ese ser. Experimentaría la satisfacción de mascar hojas verdes, el miedo cuando se aproxima un depredador, el corazón palpitante de un animal que es atacado. La desesperación por vivir. Y entonces me volvería uno con la bestia que me come.

¿Qué tal si pudiera entrar en todas esas criaturas y ser todas ellas al mismo tiempo? Algunos conocen el mundo con la vista, otros viven en un mundo de olores, inclusive otros sobreviven descubriendo impulsos eléctricos. Desde dentro de un solo mundo, podría experimentar mil mundos diferentes.

Podría ser una abeja que ve un espectro de colores más allá del conocido por los humanos. O un gusano que vive en un mundo casi bidimensional. Calentarme como un lagarto al sol, enfriarme como un pingüino de la Antártica. Mojado como un pez, seco como una polilla del desierto. Veloz como un halcón, lento como un perezoso. Inteligente como un ángel, silencioso como una piedra. Todo al mismo tiempo. Ilimitada diversidad de experiencias. Cada uno el centro de un mundo propio.

Y al mismo tiempo que soy uno con todos, viviendo dentro de ellos y sintiendo qué real es todo eso, permanecería trascendente y al margen de todo. Infinitamente por encima e íntimamente dentro, todo al mismo tiempo.

Entonces habría una historia. Y yo, el jugador, sería el autor. En una historia, puedes expresar tus más profundos pensamientos, pensamientos que de otra manera serían inefables.

Mi historia sería una historia muy grande, una gran obra llena de historias pequeñas. Y en las historias pequeñas, estaría la diversión, ya que daría poder a algunas de mis criaturas favoritas para influir en el resultado de esas pequeñas historias. Para ser el héroe o el villano—o simplemente un cobarde. Tomar parte o estar a un lado. Serían sólo su elección y cada uno tendría que vivir con sus decisiones.

Después de todo, su conciencia es mi conciencia. Desde que yo tengo libre albedrío de crear toda esta gran historia, también podría tener libre albedrío, desde dentro, en estas historias pequeñas. Y eso es parte de la gran historia.

Así que habría esta historia con el protagonista y el antagonista, y yo estaría dentro de ambos, pero al mismo tiempo estaría del lado del protagonista y en contra del antagonista. Soy infinito e ilimitado, ¿recuerdan? Así que puedo encontrarme en una criatura que está de mi lado y a la vez en contra mío. Puedo ser el cazador y el cazado. Y simpatizar y sentir el dolor de ambos.

Y entonces, en la historia grande, a través del clímax de todas las historias pequeñas y sus héroes pequeños, mi lado ganaría. Todos reconocerían el Yo que está dentro de ellos, e incluso Yo mismo me daría cuenta que estoy allí. Y me sorprendería.

Wawww, veo que se deben estar divirtiendo...