La Torá que está guardada en el arca es un gran rollo de pergamino sobre el que un Escriba (Sofer) especialmente preparado escribió los Cinco Libros de Moisés a mano.

Leer la Torá es un desafío pues en el texto no aparecen vocales ni signos de puntuación, y cada Escriba tiene un diferente estilo de letras.