Cuando se intensificó el hambre en Egipto, y los egipcios solicitaron de Iosef que les provea alimentos, los Sabios1 nos cuentan que Iosef los obligó a circuncidarse, y recién entonces los alimentó. Esto está implícito en el versículo 2 : "He aquí para ustedes semilla y sembrarán la tierra". Dice sobre ello en los escritos cabalísticos del Arí Z"L3 , que con este acto Iosef provocó una provisión adicional de vitalidad sagrada a los egipcios, y esto causó, en la práctica, un posterior recrudecimiento del exilio egipcio.
La intención de Iosef era buena. Él deseaba brindar a los egipcios un poco de santidad, y por eso les exigió circuncidarse. Él deseaba difundir santidad en el mundo entero, incluso en Egipto, la aberración de la tierra. ¿Por qué en los hechos, este acto fue considerado como negativo? El error radicó en que Iosef actuó basado en su propia decisión, sin haber de por medio una instrucción directa por parte de Di-s, y cuando se hacen cosas basadas sólo en la evaluación personal no se ven todas las consecuencias, y es posible generar con ello un flujo de energía adicional que refuerce a la impureza de Egipto y el posterior recrudecimiento del exilio.
Mezcla de Pueblos que causó Calamidades
También con Moshé ocurrió algo similar: Durante el éxodo de Egipto, Moshé llevó consigo a una mezcla de pueblos (eirev rav). Lo hizo por decisión personal sin haber recibido para ello una instrucción del Altísimo, y en la práctica esto causó más tarde el pecado del becerro de oro. Esto es lo que Di-s le dijo4 : "Corrompió tu pueblo que tú has extraído" – el 'eirev rav' que tú extrajiste, por tu propia decisión, es lo que 'corrompió'5 .
De aquí debemos tomar una lección siempre vigente: No debemos actuar basados sólo en nuestra idea, también cuando el objetivo es bueno y positivo. Debe acercarse a los judíos a la Torá, debe hacerse amar a la Torá y las Mitzvot por parte de todo judío, pero esto debe llevarse a cabo sólo tal cual lo indica el Altísimo- en la halajá, la ley de la Torá- sin concesiones y sin 'acomodar' la Torá y las Mitzvot al espíritu de la época.
Agua y no Nafta
Hay quienes argumentan, que en la situación actual no se puede ser cuidadoso y respetar también la rayita de la letra 'iud' para no alejar a aquellos que desean acercarse. Hay quienes pretenden cambiar por decisión personal cosas de la Torá con el elevado objetivo de acercar a los judíos a la Torá. Hay que recordar que incluso Iosef y Moshé Rabeinu causaron consecuencias indeseables cuando actuaron de motus propio, y cuánto más, gente de nuestro nivel.
Hace unos años, en una reunión de Rabinos, alguien se puso de pie y argumentó que en el momento de un incendio no se revisa la calidad del agua y se apaga el fuego también con agua sucia. A eso le respondió el Rebe, mi suegro (Rabí Iosef Itzjak), que las concesiones en temas de Torá no constituyen una situación de agua sucia sino de nafta, que sólo alimenta el incendio.
Acercar sin Alterar
La Mishná dice6 : "Sé de los alumnos de Aharón... ama a las criaturas y las acerca a la Torá". En esta indicación hay dos caras: Por un lado debe acercarse a todo judío, incluso a aquellos cuya única virtud radica en el hecho de que son criaturas del 'Altísimo'. Y por el otro lado, se lo debe acercar "Hacia la Torá"- ellos hacia la Torá y no la Torá hacia ellos. Debe llevarse a la gente hacia la Torá y no 'acercar' y adecuar la Torá a la gente.
No se pide de nosotros que nos preocupemos por la Torá más de lo que Di-s mismo se preocupa por la Torá. No se nos pide actuar con ideas propias. Únicamente cuando se actúa de acuerdo a la Torá, en consonancia con la Voluntad de Di-s, es que uno se hace realmente merecedor de acercar a los judíos a la Torá, haciéndolo en un espíritu de alegría y de corazón contento.
(Likutei Sijot Tomo 1 Pág. 98)
Escribe tu comentario