El pueblo judío es llamado en la Torá con el nombre de Iosef, como dice el versículo1 : "Pastor de Israel escucha Quien conduce como al ganado a Iosef, revélate" ¿A qué se debe esto? El comentarista Rashi explica: "Todo Israel se llama Iosef porque él los mantuvo y los alimento durante los días de hambruna"; como se relata in-extenso en el párrafo bíblico de esta semana.

Esta explicación, si es tomada literalmente, no satisface en absoluto ¡¿Acaso el hecho de que durante un período, que incluso fue breve, Iosef haya alimentado a Israel, justifica que el pueblo judío todo, a lo largo de los años, sea llamado con el nombre de Iosef?!

Más aun: el apodo de Iosef al pueblo judío aparece en el contexto del pedido "Pastor de Israel escucha", se entiende entonces, que el ser llamado Iosef expresa la virtud y la cualidad elogiosa del pueblo judío ¿Pero acaso el haber sido mantenidos por Iosef en los años de hambre es un mérito tan grande para todo el pueblo de Israel?

Hambre Espiritual

Se explica en las enseñanzas místicas de la Kabalá y el jasidismo2 que todo fenómeno material que tiene lugar en este mundo, comienza y se desencadena de un fenómeno espiritual. El hecho de que Iosef se ocupó de la manutención de Israel en los días del hambre (material), indica que Iosef dota al pueblo de Israel con fuerzas espirituales3 para los días difíciles (hambre en el sentido espiritual). En época de ocultamiento del rostro Divino, de exilio y oscuridad espiritual - nos nutrimos con fuerzas de Iosef el Tzadik.

La singularidad de Iosef en contraposición a sus hermanos, las tribus, radicaba en que ellos eran pastores de ganado que se alejaron del mundo y su ruido, para que el mismo no los perturbe del servicio al Altísimo; a diferencia de ello, Iosef, se encontraba en el seno de la vida mundana - primero como intendente de la casa de Potifar, luego como el encargado de todos los presos de la cárcel, y finalmente como virrey de Egipto. Se encontraba siempre en el epicentro del "bullicio" del mundo y sus ocupaciones, y su grandeza consistía justamente en que también entonces permanecía absolutamente apegado al Altísimo.

En el Centro de la Acción

Iosef se encontraba en el exilio. Primero sometido a Potifar y luego al Faraón. Era responsable de todos los temas y problemas de la conducción y gerenciamiento de Egipto. Estaba en el centro de la acción y la vida política de Egipto. A pesar de ello, esto no hizo mella en su fe y apego total al Creador, al punto que también en el momento más álgido de sus ocupaciones seguía ligado completamente a Hashem. Con esto Iosef personificaba (más que las demás tribus e incluso más que los Patriarcas) la característica distintiva del pueblo de Israel. También el pueblo judío fue enviado al exilio, encontrándose bajo el dominio de las naciones. Consecuencia de ello no puede desconectarse del mundo para lograr su apego al Creador.

Por lo tanto debe cuidar con integridad su fe y unión con Di-s y simultáneamente vivir con la realidad del exilio y su ocupación en los temas mundanos.

Frente a las Dificultades

La fuerza para cumplir con esta misión tan difícil la recibe el pueblo de Israel de Iosef el Tzadik.

Este es el significado más profundo de que Iosef "los mantuvo y alimentó durante los días de la hambruna". Tal como él mantuvo a las tribus en los días de hambre material, así también es Iosef quien nos dota de las fuerzas para enfrentar exitosamente la hambruna espiritual - el exilio, las ocupaciones terrenales, las persecuciones y las perturbaciones.

Por eso, cuando el pueblo de Israel quiere expresar sus virtudes se autodenomina "Iosef" - pues esto expresa su capacidad de enfrentar y superar las dificultades del exilio diaspórico, con la fuerza del "Iosef" que se encuentra en el fuero interno de cada judío

(Likutei Sijot tomo 25, Pág. 252)