Es el precepto con el cual se nos ordenó separar los Bikurím y traerlos al Santuario.

Es lo que El, exaltado sea, dijo: Las primicias maduradas de tu tierra traerás a la casa del Señor, tu Di-s.

De más está decir que esta ley no es vigente salvo delante del Templo. Y (los bikurím) vienen sólo de los productos de la Tierra de Israel, Siria y la Ribera (Oriental) del Jordán. Y de los (vegetales de las) siete clases exclusivamente.

Las leyes de este precepto han sido explicadas ya en el Tratado de Bikurím.

Y allí se explicó que ellos —es decir, los Bikurím— son bienes del kohén.