Un amigo me envió el siguiente correo electrónico:
Pasados tres minutos y cuatro segundos de las 2 a.m. del 5 de Junio de éste año, la hora y fecha será: 02:03:04 05/06/07. Esto no volverá a ocurrir.
Si usted es como yo, al ver éste increíble patrón creado por nuestra convención del tiempo, quedamos fascinados (está bien, en realidad, usted está ligeramente entretenido). Esta secuencia perfecta ocurrirá tan sólo por un segundo! “Hmmm”.. Usted piensa. “Volverá a ocurrir a las 02:03:04, el 5 de Junio de 2107.” Pero eso es en cien años... Quizás lo olvide para ese momento… Quizás tengamos un sistema diferente para el calendario… Y quizás yo no esté vivo. Entonces, debería despertarme a las 2 a.m. para experimentar ésta configuración única en la vida?
Debería despertarme a las 2 a.m. para experimentar éste momento de -sólo una vez en la vida-? Luego reflexiono, un segundo después serán las 02:03:05 del 05/06/07. Esta secuencia también ocurrirá tan sólo una vez en mi vida. Cuando me despierto a las 06:09:14 05/06/07, ése segundo ocurrirá también sólo una vez.
Si solo fuésemos capaces de ver cada momento con esa luz tan especial. Si solo viéramos el patrón único de cada segundo y minuto, la bendición de sólo una vez en la vida de la que está dotado cada momento.
El mail de mi amigo trajo a mi mente una enseñanza del Rebe:
Los jasidim del Rabino Schneur Zalman de Liadi estaban llevando la cuenta siempre. Al respecto, el Rabino Sholom DovBer de Lubavitch comentaba: “Esa idea caracteriza los servicios del hombre. Las horas deben ser 'horas contadas', luego los días serán 'días contados'. Cuando un día pasa uno debe saber qué ha logrado y qué falta aún por hacer…”.
Desde ésta perspectiva “la gerencia del tiempo” adquiere un significado totalmente nuevo. Cada uno y todos los segundos producen un patrón genuinamente único que no volverá a ocurrir nunca! Y como elijo experimentar éste segundo es mi única entrada al tapiz Divino.
Así que celebre el momento. Sea alegre en el segundo. Y por encima de todo, haga algo. La oportunidad es ahora.
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