Por qué: El encendido de la menorá se instituyó como una estrategia publicitaria para anunciarle al mundo entero que Di-s obra milagros para aquellos que defienden la verdad y la justicia.

Cuándo: Los macabeos expulsaron a las fuerzas de la oscuridad usando espadas, nosotros las expulsamos con velas. Es por eso que encendemos la menorá poco después de la puesta del sol. Dos excepciones: el viernes a la noche, las velas se encienden antes de la puesta del sol. El sábado a la noche, se las enciende cuando ya es de noche.

Dónde: Allí donde estés viviendo. Pon la menorá en la entrada principal de la casa, junto al umbral, enfrente de la mezuzá. Otros tienen la costumbre de colocarla en la repisa de la ventana, frente a la calle.

El milagro de Jánuca giró en torno al aceite de oliva, así que ese es el combustible de preferencia.

Quién: Cada persona judía: hombres, mujeres y niños. En muchos hogares, el jefe de familia enciende una menorá para todos. En otros, cada uno enciende la suya. Algunos encienden una sola vela y dejan que los niños enciendan el resto.

La menorá: El milagro de Jánuca giró en torno al aceite de oliva, así que ese es el combustible de preferencia. Pero también puedes usar cualquier vela que se mantenga encendida media hora después de la salida de las estrellas. Las menorás eléctricas son buenas como decoración, pero para cumplir con la mitzvá hace falta usar las tradicionales.

Cómo:

1. Haz que todos se reúnan en torno a la menorá.

2. Enciende la vela shamash (“asistente”).

3. De pie, recita las bendiciones que figuran en el libro de oraciones.

4. Enciende las velas. La primera noche, pon una vela en el extremo derecho de la menorá y cada noche agrega una vela más hacia la izquierda. Cada noche, enciende primero la vela más nueva y luego continúa encendiendo de izquierda a derecha. Añade velas de derecha a izquierda, enciéndelas de izquierda a derecha.

5. Coloca la vela shamash en su sitio en la menorá y canta los himnos de Jánuca HaNerot Halalu o Maoz Tzur.

6. Quédate cerca de las velas durante aproximadamente media hora (excepto el viernes a la tarde). Cuéntale a tu familia algunas historias de Jánuca, diviértanse jugando todos juntos al dreidel (trompo) y disfruten de algunos deliciosos latkes ¡bien calentitos!

Para más información, consulta el Guía de la Menora.