Un joven estudioso vino a Rabí Israel Baal Shem con una pregunta. Había descubierto una contradicción en las enseñanzas de los Sabios, y quería oír cómo el maestro jasídico lo resolvería. Por un lado, dice en el Talmud, que la parnasá (sustento) que tendrá una persona durante el año entero, se determina en Rosh Hashaná. Por otro lado, también declara que "a la persona se la juzga cada día" para su sustento. ¿No es una contradicción?

El Baal Shem Tov llevó al joven Talmudista a la ventana, y apuntó a un aguatero que pasaba, con un palo atado a su espalda y un cubo de agua enlazado a cada extremo. "Vamos a hablar con él" invitó.

"Faivel, ¿cómo estás hoy, mi amigo?" El Baal Shem Tov preguntó solícitamente. "¿Cómo está tu salud y tu parnasá?"

"Gracias a Di-s estoy bien", contestó al aguatero, pero suspiró infelizmente. Se quejó sobre de lo difícil que era llevar los cubos pesados todo el día, y de que apenas ganaba dinero para sobrevivir. Además, los niños locales lo fastidiaban, y a veces se empujaban encima de sus cubos.

El Baal Shem Tov respondió con unas palabras de aliento y bendición. Él y el estudiante volvieron a la casa.

"No entiendo", dijo el joven, perplejo. "¿Qué tiene que ver lo que él dijo con mi pregunta?"

El Baal Shem Tov sonrió. "Ven mañana a esta misma hora y verás"

Al otro día, estaban de pie al lado de la ventana del Baal Shem Tov, mientras esperaban al aguatero. Al verlo, salieron para hablarle de nuevo.

"Nu, Faivel, ¿cómo están hoy las cosas"? le preguntó el Baal Shem Tov.

"Gracias a Di-s, no puedo quejarme", contestó alegremente el aguatero.

"Mi negocio es estable-después de todo, todos necesitamos el agua. No soy rico pero sobrevivo. Los cubos son pesados, pero gracias a Di-s, tengo una espalda fuerte"

"¿Y sobre los niños que lo molestan?" el Baal Shem Tov insistió.

"¡Niños!" se rió. "¡Di-s los bendiga! ¿Se supone que los niños son traviesos, ¿no?"

El aguatero siguió su camino, y el Baal Shem Tov se volvió a su visitante. "¿Ves? Él hizo lo mismo ayer y hoy y ganó idéntica cantidad de dinero, sin embargo, sus sentimientos fueron completamente diferentes.

Es verdad que el ingreso de una persona durante el año entero es irrevocablemente fijado en Rosh Hashaná. Pero el cómo recibimos nuestro reparto diario difiere cada día, dependiendo del juicio diario."