Matán Torá, la Entrega de la Torá en el monte Sinaí, es el acontecimiento más importante de la historia judía. Fue cuando Di-s se reveló a Su pueblo y le instruyó personalmente con los Diez Mandamientos y toda la Torá, designándolo como un pueblo único encargado de cumplir una misión Divina. Sigue leyendo para conocer 12 datos sobre este acontecimiento fundacional que sigue dando forma a cada parte de nuestras vidas.
1. Es cuando recibimos la posesión más preciada de Di-s
La Torá es descrita como el tesoro escondido de Di-s1 y una fuente constante de deleite Divino.2 Matán Torá es cuando Di-s tomó Su posesión más preciada, la Torá, y la legó a Su nación, convirtiéndola en una herencia de cada judío.3
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2. 50 días después del Éxodo
Los judíos salieron de Egipto el primer día de Pésaj, el 15 de Nisán de 2448 (1313 a. e. c.). Cincuenta días después, en Shabat,4 el 6 de Siván,5 recibieron la Torá en el monte Sinaí. Cuando los judíos aún estaban esclavizados en Egipto, Di-s anunció que recibirían la Torá al ser liberados,6 indicando que Matán Torá era el objetivo final del Éxodo.7
3. El monte Sinaí fue el candidato ganador
Una tradición rabínica relata que cuando llegó el momento de que Di-s se revelara sobre una montaña, las distintas montañas empezaron a disputarse el puesto, cada una afirmando que era superior a las demás. Sólo el Sinaí, que no destacaba en nada, permaneció en silencio. Por esta razón, el humilde Sinaí fue elegido, dándonos la eterna lección de que la humildad es clave para aceptar la sabiduría de Di-s.8
4. Fue precedido por una intensa preparación
Tan pronto como los judíos abandonaron Egipto, comenzaron a prepararse para el acontecimiento de sus vidas. Los cincuenta días que transcurrieron desde el Éxodo hasta Matán Torá estuvieron marcados por intensos esfuerzos para librarse de la impureza egipcia profundamente arraigada en sus psiques por décadas de esclavitud y preparar sus mentes y corazones para una nueva realidad Divina.9 Después de llegar al desierto del Sinaí el 1 de Siván, se tomaron medidas preparatorias adicionales,10 que culminaron con la declaración desinteresada de los judíos el 5 de Siván: "¡Haremos y [sólo entonces] entenderemos!"11
5. Todos los judíos oyeron a Di-s
En la mañana del 6 de Siván, los judíos se despertaron con truenos y relámpagos y un potente toque de shofar. Al acercarse al monte Sinaí, lo vieron en llamas, con una espesa nube de humo en su cima. Temblando de asombro y temor, se reunieron al pie de la montaña mientras Moisés ascendía solo a la cima.12
Con este increíble telón de fondo, Di-s procedió a pronunciar los dos primeros de los Diez Mandamientos, escuchados por todos y cada uno de los judíos presentes. Con la pronunciación de cada mandamiento, todo el pueblo judío moría por la intensidad de la revelación Divina, y Di-s los devolvía a la vida. Al darse cuenta de que percibir a Di-s era demasiado para ellos, el pueblo pidió a Moisés que les transmitiera los ocho mandamientos restantes.13
6. Tú también estabas allí
Una tradición midráshica enseña que en el monte Sinaí no sólo estaban presentes todos los judíos vivos en aquel momento, sino también todas las almas judías (incluidos todos los conversos) que nacerían después. Tú y yo fuimos testigos de la revelación Divina y comprometimos nuestras vidas a llevar a cabo el plan de Di-s.14
7. Acompañado de milagros
Las fuentes midráshicas describen varios milagros que ocurrieron en Matán Torá, entre ellos: Di-s levantó el monte Sinaí y lo sostuvo sobre las cabezas de los israelitas;15 los judíos vieron el trueno y oyeron el relámpago;16 y la voz de Di-s no tuvo eco.17 Lejos de ser meras muestras de proezas sobrenaturales, cada uno de estos milagros está repleto de significado y arroja luz sobre una dimensión más profunda de la Entrega de la Torá.
8. Los Diez Mandamientos fueron el núcleo
En este suceso trascendental, Di-s transmitió Diez Mandamientos —aparentemente solo una muestra— de los 613 mandamientos que serían enseñados durante los siguientes 40 años. En verdad, sin embargo, los Diez Mandamientos son el núcleo de toda la Torá Oral y Escrita, toda la cual nos fue comunicada en forma concentrada en ese día.18
9. Cuando el cielo se encontró con la tierra
Además de transmitir la Torá, Matán Torá propició una renovación espiritual de proporciones impresionantes. Antes de Matán Torá, existía una restricción que impedía el entrelazamiento del cielo y la tierra. La espiritualidad y la santidad pertenecían al dominio de Di-s, permaneciendo divorciadas de lo físico. Pero todo eso cambió cuando Di-s dio la Torá. Hoy en día, cuando se cumple una mitzvá con un objeto tangible (como ponerse tefilín hechos con la piel de una vaca), el objeto de la mitzvá se impregna de santidad. Matán Torá es, por tanto, el momento en que el cielo se encontró con la tierra, dándonos el poder de transformar este mundo en un hogar para la Divinidad.19
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10. Es cuando Di-s nos desposó
La Mishná describe Matán Torá como el día de la boda de Di-s, el novio, e Israel, Su novia.20 Desde ese día, la nación judía está casada con Di-s: le dedicamos nuestras vidas, y Él acepta la responsabilidad de proveer todas nuestras necesidades.21
11. Lo conmemoramos en Shavuot
La festividad de Shavuot, que se celebra anualmente los días 6 y 7 de Siván, conmemora la Entrega de la Torá hace más de 3.000 años. El pensamiento judío enseña que las fechas que conmemoran acontecimientos históricos no son sólo momentos para recordar y reflexionar, sino oportunidades para revivir: cada año, en Shavuot, volvemos a experimentar la Entrega de la Torá.22 Cuando escuchamos la lectura de los Diez Mandamientos en la sinagoga, ¡es como si los oyéramos de Di-s mismo!23
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12. Transformó la realidad para siempre
Matán Torá fue un acontecimiento decisivo que cambió la realidad para siempre, transformando la relación entre el Creador y el ser humano y la forma en que vivimos nuestras vidas. Anunció el propósito de nuestra existencia e impartió instrucciones claras sobre cómo lograrlo, trazando el camino de cada individuo y del mundo en general hasta el final de los tiempos.
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