Sin embargo, el Alma Animal vitalizadora en el judío, que deriva del lado de kelipá y que se inviste en la sangre del hombre, como se indicó anteriormente, y las almas de los animales, las bestias, los pájaros y los peces que son puros [de acuerdo a la ley de la Torá] y [por eso] permitidos para el consumo [del judío], así como también la existencia y vitalidad de todo en el mundo inanimado y en el vegetal que está permitido para su consumo [se derivan de kelipát noga]. De la misma manera también la existencia y vitalidad de cada acto, palabra y pensamiento en asuntos mundanos que no contienen un aspecto prohibido —que no son raíz ni rama de los 365 preceptos prohibidos y sus derivados, ya sea [prohibidos] por la autoridad explícita de la Torá o por orden Rabínica— pero que no son ejecutados en aras del Cielo sino por la voluntad del cuerpo, su deseo y su apetencia —aun si es una necesidad del cuerpo y [necesario para] su misma preservación y vida, sólo que su intención [es defectuosa porque] no es en aras del Cielo, es decir, para usar su cuerpo [como instrumento] al servicio de Di-s—, todos estos actos, palabras y pensamientos no son mejores que el Alma Animal vitalizadora misma.
Todo en este conjunto de cosas fluye y emana de la segunda gradación de kelipot y sitrá ajará, que es [en orden progresivo ascendente] la cuarta kelipá, denominada kelipat noga. Porque en este mundo, denominado "Mundo de Asiá" ("Acción") la mayor parte, de hecho casi todo, es mal [de kelipat noga], con sólo poco bien entremezclado en ella. [De esta [mínima cantidad de bien dentro de kelipat noga] vienen las buenas cualidades que se encuentran en el Alma Animal del judío, como ha sido explicado antes].
Ahora bien, kelipat noga es una categoría intermedia entre las tres kelipot totalmente impuras y la categoría y el grado de la Santidad. Por lo tanto, algunas veces es absorbida dentro de las tres kelipot impuras [9como se explica en Etz Jaím, Portal 49, al principio del cap. 4, en nombre del Zohar], y en otros momentos es absorbida en el nivel de la Santidad y elevada a su categoría. Esto es cuando el bien que está entremezclado en ella es extraído [y separado] del mal, prevalece [sobre aquél], y asciende para ser absorbido en la Santidad. Por ejemplo, si uno come carne vacuna grasa y bebe vino aromático [no por el deseo físico sino] a fin de distender su mente para [el servicio a] Di-s y por Su Torá —como dijo Ravá: "El vino y la fragancia [hacen que mi mente sea más receptiva]"— o a fin de cumplir los mandamientos de disfrutar el Shabat y las Festividades. Entonces la vitalidad de la carne y del vino que se originó en kelipat noga es extraída [del mal] y asciende a Di-s como un holocausto y sacrificio, [absorbida en la santidad].
Análogamente [en relación con la palabra: El caso de] aquel que hace un comentario divertido para aguzar su mente y hacer que su corazón se regocije en Di-s y Su Torá y servicio, los que deben realizarse con alegría —como solía hacer Ravá con sus discípulos, comenzando su discurso primero con una observación divertida, con lo cual los alumnos se ponían de buen humor—.
Por el contrario, si una persona es de aquellas que comen carne glotonamente y se llenan de vino por gula a fin de satisfacer su apetito corporal y Alma Animal, entonces, como este apetito por los placeres pertenece al elemento Agua de los cuatro elementos de mal del Alma Animal, la vitalidad que está dentro de la carne y del vino que ha ingerido se degrada y es absorbida temporalmente en el mal total de las tres kelipot impuras. Su cuerpo [—el del glotón—] se convierte en una vestimenta y un "vehículo" para estas kelipot temporalmente, hasta que la persona se arrepienta y retorne al servicio de Di-s y a su Torá. Porque en tanto la carne y el vino eran kasher y permisibles, puede revertirse y ascender con él cuando retorna al servicio de Di-s. Esto está implícito en el término heter ("permisibilidad") y mutar ("permitido"), vale decir, que no está atado y cautivo (asur) por el poder de las "fuerzas extrañas" impidiéndole que regrese y ascienda a Di-s. Sin embargo, [aun cuando esta energía regresa a Di-s] queda en el cuerpo un resabio [de mal]. Y por este motivo el cuerpo debe pasar por el "Purgatorio de la Tumba", como será explicado más adelante.
Así es también con respecto a la vitalidad de las gotas de semen emitidas del cuerpo con avidez animal por aquel que no se ha comportado con santidad durante la intimidad con su mujer durante su estado de pureza.
No es así el caso con las comidas prohibidas y el coito ilícito, que [porque son actos prohibidos] derivan [su vitalidad] de las tres kelipot totalmente impuras. Estos están cautivos y atados por las "fuerzas extrañas" para siempre. No se elevan [de las kelipot] hasta que "llegue su día", cuando [el mal desaparecerá totalmente de la tierra porque] "la muerte será tragada [—erradicada—] para siempre, como está escrito: "Y Yo eliminaré el espíritu de la impureza de la tierra". O hasta que [el pecador] se arrepienta tan sinceramente que sus pecados premeditados se vuelvan verdaderos méritos. Esto es [logrado mediante] el "arrepentimiento por amor [a Di-s]" proveniente de las profundidades del corazón, con gran amor y fervor, y de un alma que apasionadamente desea unirse al Di-s bendito, y sedienta de Di-s como un suelo reseco y árido [tiene sed de agua]. Porque, dado que hasta ahora, [antes de arrepentirse,] su alma había estado en un desierto árido y a la sombra de la muerte —que es la sitrá ajará— y muy alejada de la luz del Divino Semblante, en la máxima medida posible, en consecuencia su alma está [ahora, al "arrepentirse por amor",] todavía más sedienta que las almas de los justos [que jamás pecaron]. Tal como dijeran nuestros Sabios: "Donde están los penitentes [no pueden pararse los perfectamente justos]". [Sólo] en lo que se refiere al arrepentimiento surgido de tan inmenso amor se ha dicho que los pecados premeditados [del penitente] se transforman, para él, en virtudes, ya que a través de ellos ha llegado a este gran amor.
Pero en el caso del arrepentimiento que no proviene de un amor tal, aunque sea un arrepentimiento adecuado y Di-s seguramente lo perdonará, no obstante [sus pecados] no son transformados para él en virtudes. Ellos [no son liberados y por lo tanto no] ascienden completamente de la kelipá "hasta el tiempo final" cuando "la muerte será tragada para siempre".
Sin embargo, la vitalidad en las gotas del semen que uno emitió en vano, aunque ha sido degradada e incorporada en las tres kelipot impuras, puede no obstante ascender de allí por medio del verdadero arrepentimiento y la intensa concentración y devoción (kavaná) cuando se recita el Shemá al acostarse, como se sabe de las enseñanzas del AríZal.
Esto está implícito en el dicho Talmúdico: "Aquel que recita el Shemá al acostarse es como si sostuviera una espada de doble filo...", para matar [con uno de sus filos] los cuerpos de las "fuerzas extrañas" que se han convertido en vestimentas para la vitalidad en las gotas [de semen] y [por el otro filo] la vitalidad asciende de ellas [—de las kelipot—], como lo saben quienes están familiarizados con el Saber Esotérico. Es por eso que el pecado de emisión de semen en vano no se menciona en la Torá entre la lista de relaciones sexuales prohibidas, aun cuando [en un aspecto] es más grave que ellas, y el pecado [del individuo] es mayor en lo que hace a la enormidad y abundancia de la impureza y de las kelipot; las engendra y las multiplica en una extraordinaria cantidad con la emisión de semen en vano, aún más que mediante los coitos prohibidos. Sólo que en el caso de los coitos prohibidos [la persona] contribuye con fuerza y vitalidad adicionales en una kelipá muy impura, de la cual es incapaz de recuperar la vitalidad por medio del arrepentimiento [ordinario]*,
* NOTA
El motivo es que [en la relación prohibida] esta vitalidad fue absorbida por el nivel de iesod en el elemento "femenino" de kelipá, que recibe y absorbe la vitalidad de la santidad, lo que no sucede en la emisión de semen en vano, donde no hay elemento "femenino" de kelipá, sólo que su poder [—el de la kelipá—] y sus fuerzas invisten la vitalidad del semen, como es sabido por los conocedores del Saber Esotérico.
a menos de que se arrepienta con un amor tan grande que transforma sus males premeditados en méritos.
De lo anterior, [que la vitalidad de la relación sexual prohibida puede liberarse a través del "arrepentimiento por amor"] comprendemos aquello que dicen nuestros Sabios: "¿Cuál es "una falta que no puede ser rectificada"? Es la de aquel que ha tenido relaciones incestuosas y ha dado a luz un bastardo". Porque entonces, [una vez que ha nacido el bastardo,] aunque el pecador haga un arrepentimiento tan grande [como el de "arrepentimiento por amor"], no puede hacer que la vitalidad ascienda a la Santidad, ya que ésta ha descendido ya a este mundo y se ha investido en un cuerpo de carne y sangre.
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