Se dice que tanto el texto como la conmovedora melodía fueron compuestos por el renombrado justo Reb Arie Leib, uno de los seguidores del Baal Shem Tov. Fue conocido como el Shpoler Zeide, y vivió en la ciudad de Shpole en Ucrania. Es recordado como un gran exponente de Ahavat Israel, amor al prójimo judío. Esta melodía era cantada por el Shpoler Zeide antes de la plegaria de medianoche para lamentar la destrucción del Templo, "Tikun Jatzot".

El texto está dividido en cuatro partes. Cada verso es cantado en hebreo, idish y ruso (una mezcla de ruso blanco y ucraniano). La primera sección se entona con el texto y es seguido por el estribillo musical sin palabras. Sólo el primer verso se canta en los tres idiomas. La misma melodía puede ser utilizada para cada verso sucesivo.

Esta sentida melodía es un diálogo entre el Padre Todopoderoso y Sus hijos, el pueblo de Israel. El Padre busca a Sus hijos en la Diáspora, Galut, e implora que vuelvan a casa a la Tierra Santa. "¿Dónde han estado que me han abandonado?" Pregunta a Sus hijos, "Queridos hijos, vuelvan a casa, Me siento desolado sin ustedes". La respuesta de los hijos es "Pero Padre, ¿cómo podemos retornar cuando hay un guardián bloqueando la puerta?"