Shabat no es sólo un día lejos de su trabajo "oficial"; es un día en el que entramos en una forma de ser más espiritual al despojarnos de toda actividad creativa física.
Escribir, dibujar, esculpir o interpretar un instrumento musical son algunos ejemplos de actividades "ociosas" que contrarrestan ese estado de descanso que logramos en Shabat.
Escribe tu comentario