Estimados lectores:
El primer versículo de la parashá de esta semana nos dice:
“Cuando salgas a la guerra contra tu enemigo, y el Señor, tu Dios, lo entregue en tus manos.”
A primera vista, parece que falta algo elemental en este versículo: no se menciona una batalla ni una lucha; simplemente salir a la guerra parece ser suficiente para que Dios entregue al enemigo de manera automática.
El concepto de la guerra, en términos espirituales, se refiere a nuestras batallas personales contra las debilidades que limitan nuestro crecimiento, a las tentaciones o malos hábitos que nos derriban. Solo es necesario tomar la decisión de salir a luchar, y ya tendremos la buena noticia de que Dios ha entregado al enemigo en nuestras manos.
Por otro lado, estamos en guerra en Israel desde hace casi un año, y pedimos a Hashem que los enemigos de Israel se rindan sin causar más sufrimiento a nuestro pueblo ni a los suyos. Rogamos poder vivir pronto en la era de paz y abundancia que todos anhelamos junto al Mashíaj.
¡Shabat Shalom!
Rabino Eli Levy