Lo que realmente debemos invertir en nuestros seres queridos es nuestro tiempo. Si invertiríamos en nuestros hijos la mitad del dinero y el doble del tiempo que lo que actualmente invertimos, seguro que estarían mucho mejor.

Recientemente un padre me dijo: “Con el estilo de vida que llevo, las presiones de la oficina, los viajes de negocios, compromisos sociales y un poco de tiempo en el gimnasio para mantenerme forma — ¿de dónde saco tiempo para mis hijos? ¡Realmente es imposible!”

Mi respuesta fue, que para nuestras ocupadas vidas de hoy en día, hay una sola forma de hacer tiempo para las cosas que son realmente importantes para nosotros y es utilizando la “parábola del tarro.” Déjenme explicar.

Tenemos algunas piedras y guijarros que deseamos poner en un tarro — algunas son grandes y otras pequeñas. Si primero colocamos los pequeños guijarros en el tarro, las piedras grandes no cabrán. La mejor forma de hacerlo es poner primero las piedras más grandes, y después dejar que los pequeños guijarros se aglutinen alrededor de ellos.

Si pasar tiempo con nuestra familia es en verdad importante para nosotros, entonces nuestra familia debe ser la más grande entre todas las piedras y guijarros que vamos introducir en el tarro. Al principio de cada año, mes, semana y día debemos tomar esta gran piedra de tiempo — tiempo para nuestra familia — y separar ciertas horas y días en nuestra agenda y calendario. Ahora que la piedra está en el tarro; estas horas no existen más, son exclusivas de mi familia. Entonces podemos proceder a insertar todos los pequeños guijarros (pueden ser cuantitativamente más que la “piedra grande”, pero en términos de prioridades son solo “pequeños guijarros”) — citas de negocios, compras, ocio, etc. — alrededor de la piedra grande. Notaremos, para nuestra sorpresa, que todos o la mayor parte de ellos también cabrán.

He oído a gente que se queja en su lecho de muerte que hubieran deseado haber pasado más tiempo con su familia. Nunca he oído a alguien decir que desearía haber pasado más tiempo en la oficina.