Estimados Lectores:
En pocas horas entramos en la festividad de Pesaj, la fiesta de nuestra libertad. El nacimiento del pueblo judío está marcado por la transformación de de esclavos a hombres libres.
En Pesaj ponemos énfasis en vivir esta libertad, comemos cómodamente recostados como lo hacían los reyes, tomamos cuatro copas de vino, cantamos alabanzas de agradecimiento.
Pero también es importante reflexionar sobre el concepto de libertad. A pesar de que actualmente no somos esclavos, ¿Somos realmente libres?
Sentir la plena libertad es difícil, siempre hay algo que nos ata, no limita y nos ahoga. A pesar de estar libres físicamente, nos exigimos, por la sociedad, por el “que dirán”, por que deseamos poseer cosas que no necesitamos, porque nos domina nuestra impulsividad, nuestros enojos, nuestras envidias, rencores y miserias.
Pesaj es el mejor momento para quebrar las barreras que nos limitan. Que no nos dejan crecer. Nuestros antepasados con una bolsa llena de unos panes horneados a las apuradas se aventuraron a la incertidumbre del desierto, pero con el corazón rebosando de alegría por que sabían que eran libres.
El mundo que Hashem nos dio es grandioso, y vale la pena vivirlo en libertad verdadera.
Recobrá tu libertad este Pesaj.
¡Pesaj Kasher VeSameaj! ¡Shabat Shalom!
Rabino Eli Levy