Moshé aceptó la propuesta de las tribus de Reuvén y Gad e instaló también a la mitad de la tribu de Menashé en el margen oriental del río Jordán.
Vivir en el futuro
וַיִּתֵּן לָהֶם מֹשֶׁה . . . וְלַחֲצִי שֵׁבֶט מְנַשֶּׁה . . . וְאֶת מַמְלֶכֶת עוֹג מֶלֶךְ הַבָּשָׁן וגו': (במדבר לב:לג)
Moshé dio ... a media tribu de Menashé ... el [anterior] reino de Og, rey de Bashán. Números 32:33

Para asegurar que las tribus de Reuvén y Gad mantuvieran la perspectiva apropiada cuando se asentaran en el margen oriental del río Jordán, Moshé estableció allí también a una mitad de la tribu de Menashé. La tribu de este era conocida por su amor a la Tierra de Israel, es decir, su dedicación a la depuración del mundo material, que se logra ante todo en la Tierra de Israel. Además, al establecer una mitad de esta tribu en el margen occidental del Jordán y otra mitad en el margen oriental, Moshé demostró que la tribu no se asentaba allí para eludir la responsabilidad de su misión en el margen occidental. Por último, Iosef había dado a su hijo el nombre de Menashé el fundador de esta tribu porque deseaba recordar que la vida fuera de la tierra de Israel no es la condición natural del judío.

Aprendemos de todo esto que la forma de llevar al mundo a su estado ideal el Futuro Mesiánico es abrazando en forma plena el desafío de elevar y depurar el mundo, ya que es este el objetivo último de la Redención Mesiánica.1