No, no es un “timbre judío”. Es un dispositivo de seguridad para el hogar llamado mezuzá, y está conectado con la mejor agencia de protección.

El software de este dispositivo es un pergamino que contiene un texto que comienza con las palabras “Escucha Israel, Di-s es nuestro Di-s, El señor es uno”. Estas palabras poderosas resumen el mandato de un judío de infundir el mundo con la unidad de Di-s. Fijamos la mezuzá en el marco de nuestras puertas, y la unidad de Di-s nos rodea y nos protege.

Se necesita:

1. Un pergamino de mezuzá. La mezuzá debe ser escrita a mano por un escriba sobre pergamino especialmente preparado con tipos de tinta y plumas específicas. El mercado está lleno de mezuzot impresas o preparadas inadecuadamente, entonces, hay que asegurarse de adquirir una de una fuente confiable.

2. Una cajita protectora.

3. Un martillo y clavos. Pegamento fuerte o cinta adhesiva de doble cara.

Dónde:

En cada puerta de la casa u oficina que abre hacia otro cuarto propiamente dicho, un espacio de aproximadamente 2 × 2 metros, con excepción de los baños. Esto incluye pasillos, closets vestidores, etcétera.

En el marco de la derecha de la puerta, yendo en dirección hacia donde la puerta abre. Si la puerta conduce al interior de la casa, se ubica la mezuzá a la derecha de la persona que entra, del mismo modo, si la puerta abre hacia afuera. En una entrada o portal sin puerta, hay que considerar la importancia y función de los cuartos y fijar la mezuzá a la derecha de la entrada del cuarto más importante.

Se coloca en la parte inferior de la tercera parte superior del marco de la puerta, en diagonal, con el extremo superior apuntando hacia adentro.

Cómo:

Recitar:

Bendito eres Tú, Señor nuestro Di-s, Rey del Universo, que nos Has santificado con Tus preceptos y nos Has ordenado fijar la Mezuzá.

Fijar la/s mezuzá/mezuzot. Una bendición es suficiente para todas las mezuzot fijadas en una sesión ininterrumpida.

Se acostumbra tocar la mezuzá al entrar o salir, y luego besar los dedos que la tocaron.

Al menos una vez a cada siete años, hay que revisar las mezuzot profesionalmente, para asegurarse de que están intactas y que ninguna letra se quebró o borró.