Rabí Yitzjak Vorst es una de las fuerzas dinámicas detrás de la actividad Lubavitch en Holanda. El encaja bien en esta tarea, porque la exactitud en el tiempo y el cálculo de programas están insertos en su cultura holandesa. El ha sido también el recipiente de numerosas respuestas “oportunas” cuando él mantenía correspondencia con el Rebe. Obviamente no es una simple cuestión de cultura.
Rabí Vorst relata, “La Segunda Guerra Mundial no pudo destruir el eslabón de mi familia de siete generaciones con la Comunidad Judía Holandesa. Después de las pruebas y tribulaciones de la guerra, mi padre se dedicó a reconstruir la vida judía aquí, mientras que al mismo tiempo instaba a la juventud a emigrar a Israel. Cuando me gradué de ingeniero, pospuse mi profesión, eligiendo saborear más profundamente el estudio de la Torá. Me matriculé en la Yeshivá Lubavitch en Lod, Israel."
“Durante la primavera, pasé las vacaciones de la Yeshivá en el entonces pequeño pueblo de Ashdot Yam, a orillas del mar. Supe que se estaba construyendo allí un puerto nuevo. Considerando mi futuro, pregunté acerca de un posible empleo en el proyecto. Mi solicitud fue aceptada rápidamente. Habiendo pasado dos meses de estudio en la Yeshivá, quise buscar el consejo del Rebe y su bendición antes de tomar una decisión final y firmar el contrato. ”
“Escribí una carta al Rebe, pero no recibí respuesta. Consulté con el mashpia de la Yeshivá, Rabí Shlomo Jaim Keselman, quien servía como guía espiritual de los estudiantes. 'Tal vez la carta se perdió en el correo’, sugirió él. Escribí nuevamente. Todavía sin respuesta. Pregunté al Rabí Keselman una vez más. Con una mirada pensativa él respondió ‘Yo pienso que el Rebe está esperando que te decidas por ti mismo si quieres continuar tus estudios en la Yeshivá. ”
"Yo ya había llegado a la conclusión de que debería continuar el curso de estudios que había comenzado en la Yeshivá. Así el viernes de mañana escribí al Rebe mi decisión. Salí para depositar la carta, sólo para descubrir dos días más tarde que había llegado una carta para mí de Nueva York, depositada antes de que el Rebe recibiera mi carta."
“La respuesta del Rebe a mi pregunta era clara. El me aconsejaba continuar estudiando por al menos dos años. La carta estaba fechada el 9 de Elul. ”
“Después de un año inspirado en la Yeshivá en Israel, sentí que era tiempo de viajar a los Estados Unidos y ver al Rebe. Brevemente después de mi llegada, me preparé para yejidut. Mi carta contenía varias preguntas y pedidos de bendiciones. También incluí una nota acerca de mi padre A”H, el último Rabí principal de Rotterdam, reiterando pedidos previos para que el Rebe nombre un sheliaj oficial para llenar las necesidades urgentes de la Comunidad Judía Holandesa. Hasta ese día mi padre no había recibido una respuesta. ”
“Después de responder a mis preguntas personales, el Rebe se dirigió al pedido de mi padre y dijo: 'No he encontrado todavía la persona apropiada que desee y sea capaz de tomar el puesto’. En este punto los ojos del Rebe se encontraron con los míos, y me miró con una amplia sonrisa. ”
“Más tarde, meditando sobre esta yejidut, sospeché que el Rebe estaba insinuando que yo tomara esta responsabilidad. Decidí preguntar al Rebe si esa fue su intención. La respuesta del Rebe fue corta y al punto: ‘Continua tus estudios’. ”
“Los meses pasaron y me concentré vigorosamente en mis estudios. Eventualmente mi visado estaba cerca de expirar y consulté al Rebe nuevamente. Yo me estaba debatiendo entre volver a Israel o extender mi estadía en los Estados Unidos.”
"No recibí respuesta. Por consejo del Secretario del Rebe, Rabí Hodakov, escribí una segunda vez. Todavía no hubo respuesta. Pero un mes mas tarde recibí respuesta del Rebe, la cual me indicaba claramente que yo debería retornar para ayudar a construir la Comunidad Judía Holandesa. Preguntándome por qué esta respuesta había demorado tanto en venir, eché un vistazo a la fecha de la respuesta. Era el 9 de Elul, exactamente dos años desde aquella primera respuesta que todavía había recibido mientras estaba estudiando en Israel: continuar estudiando por al menos dos años!!.”
“Mientras estaba estudiando en Nueva York, tuve otra experiencia con el ‘peritaje’ del Rebe en cuanto a exactitud con el tiempo. Yo tenía 25 años y mis amigos y parientes me habían insinuado amablemente que considerara casarme. Busqué el consejo del Rebe. En vez de dar su bendición habitual para este tipo de pregunta, el Rebe respondió: ‘No te afanes en este asunto en absoluto hasta el fin del año escolar, o por lo menos hasta después de la fiesta de Shavuot’.”
“La respuesta me sorprendió. Me pregunté sobre las dos fechas que el Rebe había mencionado. ¿Qué quería decir con esta respuesta?.”
“Solo después entendí la dimensión de este marco de tiempo. En Brunoy (cerca de París) hay una familia Lubavitch bien conocida llamada Kalmanson. Algún tiempo después recibí la respuesta susodicha del Rebe, la hija consideraba un viaje a los Estados Unidos. Su intención era doble: ver al Rebe y averiguar sobre una pareja adecuada. Ella dudaba entre pasar la fiesta de Shavuot en Crown Heights o fijar su fecha de regreso para el fin del año escolar. ”
“Esa joven más tarde se convirtió en mi esposa. Estaba claro ahora que el momento en que yo debía comenzar a actuar con respecto a mi futuro, había dependido de la fecha de partida de su billete de avión Paris-Nueva York. ”
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