• La carne, leche y huevos de ciertas especies de animales son permitidas para el consumo, mientras que otras son prohibidas. Además, una serie de leyes trata sobre cómo el animal debe ser faenado y qué partes del animal pueden ser ingeridas.
  • Carne y leche no deben mezclarse nunca. Se utilizan utensilios separados para cada uno, y se observa un período de espera para comerlos.
  • Frutas, vegetales y granos son siempre kosher, pero deben estar libres de insectos. El jugo de uva o el vino, sin embargo, deben ser certificados kosher.
  • Ya que incluso un pequeño rastro de sustancia no kosher puede hacer un alimento no kosher, todos los alimentos procesados y establecimientos alimenticios requieren la certificación de un rabino confiable o la supervisión de una agencia de kashrut.