Determinar que un animal es de una especie kosher es sólo el primer paso. Otras leyes dictan cómo el animal debe ser faenado y qué partes de él pueden ser comidas.

Los mamíferos y las aves kosher son faenados en un procedimiento especial llamado shejitá, en el cual la garganta del animal es rápidamente cortada, en un corte exacto y sin dolor con un cuchillo perfectamente filoso y liso (llamado jalaf) por un shojet - altamente entrenado, cuidadoso de la Torá y temeroso de Di-s.

Un animal que muere o es matado por cualquier otro medio no es kosher. También se prohíbe terminantemente comer la carne arrancada del animal mientras que está vivo (esta prohibición es una de Siete leyes universales de Noé y es la única ley kosher que se aplica tanto a los no judíos así como a judíos).

Los peces no requieren shejitá.