La carne y leche nunca se combinan. Se utilizan utensilios separados para cada uno, y se observa un período de espera entre ellos para comerlos.

Los alimentos kosher se dividen en tres categorías:

Carne: incluye la carne o los huesos de los mamíferos y las aves, las sopas o las salsas hechos con ellos, y cualquier alimento que contenga incluso una pequeña cantidad de lo antedicho.

Lácteos: incluye la leche de cualquier animal kosher, y todos los productos lácteos hechos con ella (crema, mantequilla, queso, etc.), y cualquier alimento que contenga incluso una pequeña cantidad de lo antedicho.

Neutro: los alimentos que no son ni "carne" ni "lácteos". Los huevos son neutros, al igual que todas las frutas, vegetales y granos. Los alimentos neutros se pueden mezclar y comer junto con la carne o los lácteos.